Tal vez hayas escuchado hablar del famoso ‘clean look’ que tanto se ha popularizado en Tik Tok. Pues este estilo de peinado solo se puede lograr con un cabello extremedamente sucio, es decir sin haberse lavado al menos por tres días. De ahí que se haya popularizado en redes sociales el hecho de no lavarse el cabello o incluso el cuerpo durante algunas semanas. Recordemos el caso de la Miss Universo. Luego de su coronación como la reina filipino-estadounidense, R’Bonney Gabriel compartió el viral secreto de belleza que le aseguró el éxito y la corona en las pasarelas del famoso certamen: no lavarse el cabello ni bañarse regularmente durante varias semanas.
Además de lo sorprendente (y efectivo) que puede ser este polémico truco de belleza, existe un trasfondo de efectos secundarios que podrían poner en peligro la salud de tu cabello y piel si sigues esta tendencia. Para esclarecer dudas, la dermatóloga y fundadora de DermaBeauty, Alicia Quispe nos explica cuáles podrían ser las consecuencias de no asearse adecuadamente durante varias semanas.
¿Qué pasa si dejas de bañarte durante mucho tiempo?
Qué tanto te verás afectada dependerá del tipo de piel que tengas. De acuerdo a la experta en dermatología, la acumulación de suciedad y contaminantes externos crearán una capa extra de grasa sobre tu piel.
“El cuerpo no emite tanta grasa como el cuero cabelludo, pero en el caso no se lave con regularidad, de todas formas se empezará a notar en ciertas partes del cuerpo”, revela la especialista. Pueden aparecer espinillas o granitos en el pecho y la espalda, ya que son las únicas zonas donde hay glándulas sebáceas. En el caso de otras partes, los agentes externos como el smog, la contaminación y el sol se acumularán en el cuerpo llegando a ocasionar incluso resequedad y manchas blancas por la falta de hidratación.
¿Qué productos usar para bañarse?
Generalmente, las personas utilizan jabones comerciales (cuyo PH más fuerte, más alcalino que el de la piel puede resecarla e incluso destruir su barrera protectora), por lo que el producto ideal para un buen lavado es un limpiador suave. Mínimo una vez al día, bañarse con uno suave, sin tanto detergente y con PH balanceado. Y si se quiere dar el mejor cuidado, apostar por geles de baño dermatológicos que previenen y alivian irritaciones, hidratan y mantienen la barrera natural de la piel.
De acuerdo a la dermatóloga, además del baño adecuado, es recomendable recuperar la piel con hidratantes corporales y/o protectores solares (según el lugar en el que se esté).
¿Qué le pasa al cabello si dejas de lavarlo durante muchos días?
Como el cuero cabelludo es mucho más sensible que la piel del resto del cuerpo, lo más probable es que la irritación se manifieste de peor forma en esa área. Tu cabello empezará a acumular grasa y suciedad, lo que provocará que sufras de afecciones como excesiva seborrea, caspa o hasta dermatitis seborreica cuyo grado dependerá del tipo de cuero cabelludo que tengas.
Y si a tu cabello sucio le sumas (en el supuesto) laca, geles, cremas y otros agentes externos fuertes para mantener su forma; la condición se agravará aún más llegando incluso a resecar y deshidratar el mismo cabello.
¿Cómo lavarse el cabello correctamente?
“Va a depender mucho del tipo de cuero cabelludo que tiene cada persona. Una con el cuero cabelludo graso sí o sí se tiene que lavar interdiario o hasta incluso a diario. Y si tu cabello es seco, hacerlo en el espacio de cada dos o tres días”, recomienda la dermatóloga.
Y si ya sufres de alguna de las condiciones mencionadas anteriormente, lo primero que se necesita hacer es control de daños. Primero, lavar el cabello con un champú medicado. Segundo, hacerle un tratamiento para recuperarlo poco a poco.
Además, incluso con el cabello sucio, también se puede lavar al seco (si alguien como R’Bonney está decidida a mantener el cabello lo más alejado posible del agua o si de plano el ajetreo del día a día no le permite dedicarle más tiempo). Según la especialista, existen champús en seco que se utilizan para absorber los excesos de grasa y residuos acumulados en el cabello, dejándole un efecto de mayor frescura entre lavados.
Una herramienta que puede resultar muy útil, pero que aún así no debería reemplazar al lavado frecuente. “Solo se debería utilizar máximo una vez por semana, porque, si tienes un cuero cabelludo graso, te puede generar aún más grasa, caspa o dermatitis seborreica”, señala la especialista.
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