Siete reglas de etiqueta para un buen regifting

Todos hemos recibido obsequios que no nos han gustado, o que nos han gustado, pero sabemos que jamás usaremos. O que dejamos en el olvido. El regifting es aquella práctica en la que regalamos esos regalos que aquella persona que no nos conoce muy bien nos hizo. ¿Es correcto hacerlo? No podemos dar una respuesta definitiva, sin embargo lo que sí haremos es darte algunos consejos para hacerlo adecuadamente: 

1. Haz el regifting en distintos círculos: No re-regales a una persona que podría conocer a quien te dio el regalo original (entre familiares, colegas, grupo de amigos). No importa si ha pasado tiempo considerable.

2. No re-regales algo usado: Una cosa es regalar lo que que jamás abriste y otra regalar lo que está usado (no interesa si solo lo hiciste para “probar” el regalo). Puede ofender a la otra persona.

3. Conserva el empaque original: Haz regifting de aquello que aún conservas en su empaque inicial (caja, bolsa) y si este aún se encuentra en buen estado. No se te ocurra ponerlo en un empaque distinto.

(Foto: Shutterstock)

4. Cuidado con las señas personales: Ten mucho cuidado de re-regalar algo que lleve tus iniciales o que conserve alguna tarjeta para ti o una dedicatoria.

5. Espera un tiempo: Espera un lapso considerable para hacer regifting, por si la persona que te ha hecho el regalo se le ocurre preguntarte por él.

6. Quédate con aquello hecho a mano: Además de ser único, la persona que te lo regaló se esforzó para crear tu regalo. Debes ser respetuoso con ello.

7. No re-regales lo feo: Puede que no te guste a ti, pero sí a otras personas. Pero si consideras que aquel regalo que no te gusta en sin discusiones de mal gusto e inservible, búscale un mejor objetivo (recíclalo, por ejemplo).