Era 1993 cuando Nora Suzuki y su Orquesta de la Luz pisó por primera vez suelo peruano, su explosiva “Salsa caliente del Japón” no paraba de sonar en las radios y la expectativa por bailar al ritmo de la japonesa más latina que el mundo haya visto era comprensible: ver a una veintena de nipones tocando con gran talento y sabor la salsa no era cosa de todos los días. Pero no solo eso, antes de llegar a nuestro país su sonido ya los había llevado por Nueva York, Miami, Puerto Rico, Colombia, Costa Rica, Venezuela y varios países de Europa. La Orquesta de la Luz era todo un fenómeno.
ACLARACIONESEste artículo fue publicado originalmente el 3 de abril del 2020.
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