Espíritu joven: seis razones para dejar salir tu niña interior

Cuando eras niña el mundo era un lugar hermoso. Todo parecía nuevo en interesante, encontrabas cosas lindas en lo más simple, no te preocupaba qué dirían de ti con tal de ser feliz y vivías el día con intensidad entre juegos y sonrisas.

Al crecer, comenzaste a perder de vista ese espíritu infantil conforme madurabas. Llegan las responsabilidades, las decisiones, los estudios, el trabajo, la familia y caes en la cuenta de que el mundo tiene un lado oscuro y unas reglas que antes desconocías.

Pese a todas las imposiciones que te da la sociedad, un pedacito de la felicidad está en el hecho de nunca dejar de ser niña. A veces mirar el mundo con los mismos ojos de hace algunos años te ayudará a descubrir que la vida es más linda de lo que parece.

Estos son seis motivos para empezar a vivir y disfrutar como niña otra vez.

1. Dejarás de correr todo el tiempo

De pequeña te tomabas tu tiempo para hacer las cosas que te pedían y te concentrabas en una sola por vez. Hoy vas de un lado para otro sin parar intentando cumplir con toda tu enorme lista de pendientes. A veces es bueno vivir sin preocuparte en lo que tienes que hacer mañana y enfocarte en sacarle el jugo al presente.

2. Soñarás en grande

¿Recuerdas lo que querías ser de niña? Tal vez doctora, astronauta, súper heroína o cantante. De pequeña soñabas a gran escala sin importar qué tan factible sería realizar tu deseo, algo que empezó a cambiar con el pasar de los años. Nunca debes dejar de tener grandes metas en la vida y, aunque sepas que va a ser un camino difícil, hay que dar un paso a la vez con mucha seguridad y sin temor.

3. Apreciarás los detalles que antes pasabas por alto

Andas tan apurada por el mundo que no te detienes a apreciar lo que está frente a tus ojos. Cosas tan simples como el romper de las olas mientras manejas por la Costa Verde rumbo al trabajo, el olor de los jazmines cuando corres por el parque o el color de las frutas que llevas en tu lonchera al trabajo pasan rápidamente ante ti porque las das por sentadas. Tu niña interior no dejaría de sorprenderse por ellas así que imítala de vez en cuando.

4. Serás más curiosa

Los niños son la muestra máxima de la curiosidad, todo les parece nuevo y llama su atención sin importar cuántas veces tengan la oportunidad de verlo. Esa motivación por descubrir cosas nuevas es lo que debes rescatar de ellos y ponerlo en práctica queriendo aprender nuevas destrezas, acerca de otras culturas o simplemente experimentar algo diferente. A veces salir de tu zona de confort puede ser divertido.

5. Te mantendrás activa

De niña tenías energía para correr, saltar y gritar todo el día pero ahora con las justas toleras una hora de ejercicio diario. Tal vez no vuelvas a tener el estado físico de tu infancia pero nunca debes olvidar de realizar actividades físicas para mantenerte saludable.

6. Tendrás una mentalidad más positiva

Los niños no suelen pensar en las cosas malas que les pueden pasar sino hasta que las personas que los rodean se lo dicen, para ellos todo es divertido. ¿En qué momento dejaste eso de lado para convertirte en una persona pesimista y temerosa del futuro? Ver la vida como niña te ayudará a ser más optimista y atraer la buena vibra a tu vida.