Iquitos es ideal para ir solo o acompañado. Es un destino lleno de vida.
Ir a caminar por el malecón es un clásico, para ver los paisajes que regala la selva y el río Amazonas. Justo allí, entre sus aguas, está un restaurante que recomiendo: Al frío y al fuego. Se aborda un peque peque para llegar. Es imperdible comer paiche con chonta. Si buscan un hotel bueno, bonito y barato, en el mismo malecón está La Posada del Cauchero.
En la ciudad, hay paquetes para internarte en la selva. Quédense en algún alojamiento ecológico desde donde te llevan a disfrutar de diversos recorridos, como el de reconocimiento de plantas medicinales o avistamiento de animales: osos, monos y guacamayos son algunas de las especies que verán.