La selva peruana sigue sorprendiéndonos con paisajes que parecen haber sido sacados de una película. En este caso hablaremos de la piscina natural de Betania en Satipo, Junín.
¿Cómo llegar?
No es fácil llegar a ellas y tampoco es económico. Puedes ir con una agencia de turismo o por tu cuenta. De todos modos, procura quedarte más de una noche para que el camino valga la pena.
Desde Satipo se sale a Río Tambo, desde ahí los botes parten y demoran entre 4 o 5 horas en llegar a Betania. En este punto la comunidad te va a recibir, enseñar sobre sus costumbres y llevarte hasta las piscinas. El camino es largo, por lo que procura que tu estadía solo sea de un día.
Circuito acuático
Hay riachuelos, pozas y cataratas pequeñas. De todo para que pases un día increíble, sobre todo porque puedes nadar, explorar y conectarte con la naturaleza. El agua sirve para sofocarte del caluroso clima selvático y no hay nada mejor que conocer más sobre el territorio peruano.
Comunidad ashanica
Es importante señalar que este lugar te hará sentir lejos de la vida citadina. Ellos te recibirán en el lugar, te pueden hospedar y cuidarte mientras te adentras a la selva. Son aproximadamente 200 familias las que viven ahí. Ellos protegen el lugar y son muy amables con los visitantes.
Las Piscinas Naturales de Betania son también la excusa perfecta para conocer más de las tradiciones peruanas.