La película “Dune” -que tiene como protagonistas a Timothée Chalamet, Zendaya y Jason Momoa- está basada en la novela del escritor Frank Herbertque y se encuentra actualmente disponible en HBO Max. El director, Denis Villenueve, fue el encargado de transportar a los espectadores al planeta desértico Arrakis, escenario logrado en los desiertos Wadi Rum y Rub al Khali.
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El primero es Wadi Rum y se encuentra ubicado al sur de Jordania y es conocido como Valle de la Luna. El lugar se caracteriza por ser una región montañosa formada por granito y arenisca. En el 2011 fue declarado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Además, ha estado habitado desde la prehistoria por diversas culturas, incluidos los nabateos, y desde 2007 habitan en el desierto varias tribus.
El otro desierto considerado por el director fue Rub al Khali, que está ubicado en Abu Dhabi y parte del desierto de Arabia. Es uno de los mayores desiertos de arena del mundo y geológicamente el lugar es rico en petróleo. También, se encuentra el yacimiento Shaybah uno de los importantes centros de producción de crudo ligero en Arabia Saudita.
No solo esos destinos fueron elegidos, sino que para realizar las escenas en Caladan, el otro planeta destacado en la película caracterizado por presentar varios bosques, se filmaron en Noruega pues tenía similitudes con el clima y paisaje.
El desierto mexicano Samalayuca, escenario de la primera entrega de Dune
El extenso desierto Samalayuca impresionó al director de cine David Lynch, tanto así que los paisajes del lugar lo inspiraron para grabar la película de los ochentas “Dune”. El destino mexicano se convirtió en 1984 en el planeta Arrakis.
Samalayuca cuenta con más de 63.000 hectáreas donde hay olas de arena que tienen una extensión de aproximadamente 150 km cuadrados. Además, está constituido por dunas de arena sílice, blanca y fina. No hay vegetación a la vista y muchos de los visitantes les da la ilusión como si estuvieran en el desierto del Sahara.
Asimismo, el famoso desierto no solo cautivó al director de Dune, sino también a otros cineastas. Por ejemplo, el lugar fue elegido por el chileno Alejandro Jodorowsky para filmar la reconocida película El Topo en 1970. El español Luis Buñuel también aprovechó el imponente paisaje de México para grabar Simón del Desierto en 1965. Luego, Arnold Schwarzenegger fue el protagonista de la cinta Conan el Bárbaro en 1982.