Como pocas veces se ha visto en las experimentadas cadenas de televisión, la tragedia ha enlutado a la casa mexicana Televisa, luego que dos de sus actores de la serie “Sin miedo a la verdad” perdieran la vida la noche del jueves 16 de enero durante los ensayos de grabación.
A través de un comunicado oficial, Televisa informó que Jorge Navarro Sánchez (46) y Luis Gerardo Rivera (30) fallecieron luego de caer de un puente que servía como locación de las filmaciones de la tercera temporada de la serie emitida por el canal de Las Estrellas.
En un inmueble de la colonia Agrícola Oriental, en Ciudad de México, los actores practicaban una escena riesgosa hasta que cayeron accidentalmente, provocándose un traumatismo craneoencefálico severo.
Ambos eran parte de “Sin miedo a la verdad”, la telenovela estrenada en octubre de 2018 que contaba la historia de un hacker cirbernético que enfrenta los obstáculos de su profesión, a fin de buscar justicia. Las temáticas principales de la serie involucran la corrupción, el acoso y el cyberbullying.
Jorge Navarro Sánchez había participado en “Sin miedo a la verdad” desde su primera temporada; donde interpretó a Soto, un agente de policía corrupto que trabaja de la mano con el personaje antagónico de Horacio Escamilla (Fermín Martínez). Es precisamente con Fermín Martínez con quien el actor mantenía una estrecha amistad. Tal es así que compartía continuas fotografías al lado de él. Incluso, su última postal de Instagram fue a su lado.
Además de “Sin miedo a la verdad”, Jorge Navarro Sánchez fue parte del elenco de “Monarca”; la serie internacional de Netflix, en la que también dio vida a un policía. Sin embargo, siempre mantuvo un vínculo cercano con Televisa, pues anteriormente había participado en los unitarios “La rosa de Guadalupe" y "Como dice el dicho”.
Luis Gerardo Rivera, por su parte, recién alcanzaba reconocimiento con “Sin miedo a la verdad”. Si bien había sido parte de algunas producciones cómicas en México, el actor se enfocó principalmente en su trabajo para la agencia Lemon Studios en la que trabajaba antes de ser fichado para la serie producida por Rubén Galindo.