Hace varias semanas, El Comercio estuvo presente en el lanzamiento mundial desde Estados Unidos y, semanas más tarde, pude verlo yo mismo en la presentación en el Perú. Como muchos, tenía bastantes dudas sobre el equipo, pues -como te imaginarás- una cosa es verlo en la presentación y otra tenerlo como teléfono principal durante varios días.
Ahora, he tenido la oportunidad de tener el RAZR 40 Ultra durante varias semanas. Lo he usado en mi día a día en Lima y hasta lo he llevado conmigo de viaje. Es decir, lo he aprovechado en diferentes circunstancias. ¿Qué te puedo decir sobre el equipo? Que realmente ha sido una sorpresa y en esta nota te voy a compartir mis razones.
LEE TAMBIÉN | ¿Cómo funciona un router WiFi 6? Probamos el Huawei AX3, que llega con mapa de calor
Especificaciones técnicas
El unboxing
Un dato importante: cuando abres la caja del equipo sentirás un aroma característico interesante.
El tema con los plegables
Lo primero que debemos recordar es que no se trata del primer teléfono plegable de Motorola. Sin embargo, sí es el primero que llega a nuestro país. Entonces, la marca de la M sí ha tenido una curva de aprendizaje y mejoramiento en el desarrollo de su producto.
Lo siguiente a tener en cuenta es que, adiferencia de los primeros años de los 2000, cuando la tendencia era que los teléfonos sean cada vez más chicos, hoy las pantallas son más grandes y, por lo tanto, los equipos son más voluminosos. Ahí es donde este formato de teléfono plegable encontró un espacio.
Hoy encontramos dos tipos de smartphones con pantallas que se doblan en el mercado mundial: los más alargados, del tipo ‘sapito’, ‘de tapita’ o ‘clamshell’ (en este teléfono de Motorola, los Flip de Samsung o el N2 Find de Oppo); y los que son un poco más grandes y cuadrados, que se cierran en forma de libro (como el Fold de Samsung, el Magic Vs de Honor o el Huawei Mate X2). La apuesta de los que son ‘sapito’ es por ser compactos, cómodos y eficientes. Este equipo de Motorola, en líneas generales, lo logra.
De diseño y desempeño
El modelo con el color Viva Magenta es el más llamativo. No solo por el color, sino por algunos otros detalles como la inscripción en la parte externa de la bisagra. El negro infinito es elegante y también se ve bien. En su diseño, sobre todo por la forma redondeada en sus lados, me hizo recordar al Galaxy Z Flip original, con dos grandes (e importantes) diferencias: la gran pantalla en la tapa exterior y que, cuando está cerrado, no deja espacio entre sus tapas. Como era de esperarse, la gran pantalla exterior es un imán para las huellas.
Pasemos a las pantallas. La exterior cubre casi toda la tapa y tiene los dos lentes principales clavados en una de sus esquinas. Lo interesante es que puedes colocar cualquier aplicación en el menú para usarla con el equipo cerrado. Claro está que no todas están completamente optimizadas para acomodarse a las 3,6″. Y aunque permite muchas funcionalidades (como, por ejemplo, escribir mensajes desde allí de manera bastante cómoda), el espacio limitado hace que algunas partes queden fuera de la vista. También se pueden hacer y recibir llamadas, pero utilizando los altavoces (o, en todo caso, teniendo audífonos Bluetooth conectados). Dato: vienen una serie de juegos preinstalados, que están listos para aprovechar la pantalla externa y son una interesante alternativa.
Desplegado, el Motorola RAZR 40 Ultra muestra una pantalla pOLED muy alargada, con proporciones muy particulares. Quizás por esto, algunos usuarios puedan sufrir un poco para deslizar con comodidad el menú de notificaciones superior. Pero, además, esta pantalla cuenta con características interesantes como su tasa de refresco de 165 Hz. Por lo general ofrece una buena visualización, aunque bajo la luz natural sufre un poco. El pliegue pasa realmente desapercibido, pero sobre la bisagra te cuento un poco más adelante. Aquí también se podrán aprovechar las aplicaciones que estén preparadas para este tipo de equipos.
Una de las cosas que me encantó es que cuando estás utilizando una aplicación con el equipo abierto, al cerrarlo aparecerá una notificación en la pantalla invitándote a continuar el uso, pero en un espacio más restringido. Muy interesante.
Otro dato interesante es que mantiene los gestos ya característicos en los equipos de Motorola: con dos movimientos laterales se activará y desactivará la linterna de manera inmediata, y girando dos veces el equipo se activarán las cámaras principales (cuya imagen podrás visualizar en la pantalla exterior si tienes el teléfono cerrado). Pero también, la aplicación de la cámara se activará si presionas dos veces el botón de encendido.
En cuanto al desempeño del equipo, está bastante bien. Su configuración es bastante robusta (Android 14, Snapdragon 8 Gen 1, 12 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento), compatible con Ready For por Wi-Fi y que permite usar las cámaras del teléfono como webcam vía cable.. También, como era de esperarse, para las tareas diarias no tuve ningún inconveniente y cuando me animé a probar algunos videojuegos (como Asphalt 9 o Genshin Impact), corrieron con mucha fluidez. Cada vez que abres alguno se habilita la función GameTime, que te permite desde determinar el modo de desempeño del equipo o la sensibilidad del tacto, hasta hacer capturas de pantalla y compartir contenido.
Quiero destacar también que, muy en la onda de Motorola, en este dispositivo también se trata de mantener lo más limpia que se pueda la interfaz del usuario. El fabricante, una vez más, interviene en el teléfono con solo unas cuantas aplicaciones preinstaladas, pero que son de mucha utilidad: Family Spaces, que le permiten al usuario crear diferentes espacios y controlar tanto la cantidad de tiempo en pantalla como los accesos a determinadas aplicaciones; Hello You, que es una app con diferentes accesos directos a temas relacionados con la marca; Moto, que te ayudará no solo a personalizar sino a conocer más funciones para aprovechar más tu dispositivo; y Moto Secure, una aplicación dedicada a la seguridad, con la que podrás desde crear una carpeta segura hasta habilitar la opción de PIN desordenado, para que cada vez que debas ingresar tu código de desbloqueo los números aparezcan en orden aleatorio.
La bisagra
Una cosa que me quedó muy en claro con este Motorola RAZR 40 Ultra es que la idea de este smartphone es que abras lo menos posible el teléfono. Pero no me malentiendas, no es porque su bisagra sea mala. Todo lo contrario. Como ya mencioné, tiene un cierre casi perfecto (ideal para evitar el paso de polvo que pueda dañar su mecanismo). Esto lo logra gracias a su tecnología de bisagra tipo gota de agua.
Pero al tener la pantalla ocupando todo el espacio de la tapa exterior, así como la posibilidad de que puedas colocar cualquier aplicación para usarla desde ahí, la cosa cambia. Ahora, debo confesar que -viejito yo- instintivamente abría y cerraba a cada rato el teléfono. Creo que es cuestión de adecuarte a esa nueva forma de uso.
Reitero que cuando tienes la pantalla abierta, el pliegue interno no molesta para nada y casi ni se siente al tacto. Si bien es notorio cuando la luz le da en ciertos ángulos, una vez que empiezas a usar el equipo ni lo notas.
La bisagra se siente sólida. Es lo suficientemente rígida para sostenerse plegada en diferentes graduaciones de ángulos, lo cual es fundamental si es que quieres usar este equipo sin necesidad de un atril, trípode u otro accesorio adicional. Eso sí, es lo suficientemente sólida para que, aunque lo intentes, siempre necesitarás las dos manos para abrirlo. Quizás el cierre puedas hacerlo con una mano, pero podrías provocar que se te resbale.
Antes de cerrar este apartado, hay un par de aspectos que no puedo dejar pasar por alto. Primero, que al desplegar el teléfono, este no queda completamente erguido. Es como si quedara ligeramente hacia adelante. No es un tema super evidente, pero yo lo noto.
Y lo otro es que, aunque siempre se agradecerá que se incluyan carcasas y protectores para no empezar de cero en cuestiones de seguridad (sobre todo en teléfonos tan costosos como este), los que se incluyen en este Motorola RAZR 40 Ultra me parecen demasiado básicos y hasta que no encajan como deberían con el cuerpo del equipo. Pero, una vez más, quizás se trate de un tema mío de percepción.
Algo se pierde y algo se gana
Para tener un equipo que se ve bien y que cuenta con tecnología de punta hay que sacrificar algunas cosas. Sobre todo por la manera en que está construido el teléfono y porque se trata de una línea de equipos que todavía está en pleno desarrollo.
Así tenemos que la batería y las cámaras son las que salen perdiendo en este nuevo Motorola RAZR 40 Ultra. Aunque es bien sabido que la autonomía de un equipo dependerá de cómo lo emplee el usuario, digamos que si haces un uso intenso (además de redes sociales y navegación, le metes algo de video o streaming, un poco de videojuegos y uso de las cámaras, por ejemplo) es muy probable que no llegues al final del día.
En mi caso, la mayoría de veces necesité recargarlo hacia la tarde. Lo positivo es que en la caja se incluye un adaptador de pared de 33W que permite carga rápida: en media hora tienes casi un 60% de energía y el 100% lo alcanzas en poco más de una hora.
En el tema de las cámaras, no es que sean un desastre. Todo lo contrario, son buenas cámaras. Pero si querías encontrar cámaras de nivel ultra, en este Motorola RAZR 40 Ultra no las encontrarás. Como siempre ofrecen muy buenos resultados cuando se usan en excelentes condiciones de luz.
De noche o poca iluminación es posible obtener un buen resultado, pero no será una constante. En el caso de la cámara interna (de 32MP), será quizás la que menos utilices. Sin embargo, también cumple. En suma, son buenas cámaras pero no sobresalen.
LEE TAMBIÉN | Oppo Reno 7 de 256 GB: probamos la nueva versión del celular con cámara microscópica
El Motorola RAZR 40 Ultra está disponible en el Perú desde los S/ 4.599, en versión de 12GB de RAM y 512GB de almacenamiento, a través de www.motorola.com.pe
¿Este smartphone es para ti?
Hay una cosa que me ha quedado en claro, luego de tener este Motorola RAZR 40 Ultra por varias semanas: si bien los teléfonos plegables son muy atractivos y, en especial, los que son tipo ‘sapito’ pues tienen una onda más casual y cercana con el usuario, realmente no son para cualquiera. Debemos dejar en claro que en esta categoría no estás pagando por tener el mejor smartphone del mercado en el momento, sino por tener la tecnología más moderna.
Con eso en cuenta, considero que el RAZR 40 Ultra tiene argumentos muy sólidos para competir sin miedo en este segmento tan específico, en la que Samsung lleva más años remando. ¿Cuáles son? Primero, su pantalla externa que no le pone muchas restricciones al usuario sobre lo que puede hacer con ella; segundo, un software amigable que no te complica las cosas; y tercero, que en general emite una onda más casual, más mundana para el usuario. A mí me transmitió la idea de que es una alternativa posible de alcanzar.
Pero es solo una “idea”, porque después al ver los precios -si bien es un poco menor al modelo de Samsung- sigue siendo un teléfono sumamente caro. Y, como ya mencioné, en este segmento hay que ser concientes de lo que se obtendrá y de los aspectos que tendremos que resignar.
Aquí lo importante es que Samsung ya no corre solo en este segmento, y teniendo techo por alcanzar, será muy entretenido cómo se desarrollará esta carrera en los siguientes años.
TE PUEDE INTERESAR
- ThinkPhone: cómo es el teléfono de Lenovo orientado hacia el sector empresarial
- Magic5 Pro, características y precio de un smartphone con el que Honor sigue apuntando alto
- Oppo A78: El primer smartphone de 5G de la marca china, ¿cuáles son sus características?
- Huawei Watch D – Review: Un reloj inteligente realmente orientado a la salud
- Maono WM821 – Review: si quieres mejorar el audio de tus videos, esto es lo que estabas buscando