WASHINGTON. Alrededor del 10% de la leche materna que se vende en Internet en Estados Unidos contiene también leche de vaca o leche en polvo, según una investigación publicada este lunes en la revista Pediatrics.
Este descubrimiento, realizado tras analizar 102 muestras de leche materna vendida en la red, ilustra los peligros potenciales para muchos bebés que padecen ciertos problemas de salud.
Esta leche mezclada también hace que los niños sean más vulnerables al riesgo de infecciones bacterianas y virales, identificados en un estudio previo realizado por los mismos investigadores.
"Hemos constatado que una muestra de cada 10 tipos de leche materna comprada en internet contenía cantidades importantes de leche de vaca, lo que representa un riesgo para bebés que sufren alergias o una intolerancia a la lactosa", observa la doctora Sarah Keim del "Research Institute at Nationwide Children", quien encabezó el estudio.
"Si un bebé alérgico a la leche de vaca toma esta mezcla puede enfermarse de consideración", advierte.
Este mismo equipo de investigación había determinado antes que el 21% de los padres que intentan conseguir leche materna en Internet lo hacían porque su hijo sufría algún problema de salud. En un 16% de los casos se trataba de alergia a los preparados alimenticios para bebés.
Lo que es más preocupante aún es que estudios anteriores revelaron que más del 75% de la leche vendida en Internet está contaminada con bacterias o virus.
La agencia estadounidense que regula los medicamentos (Food and Drug Administration/FDA) había advertido en 2010 sobre una posible contaminación de la leche materna no pasteurizada con otra procedencia que la madre del bebé.
"Teníamos temores, en la medida en que hay dinero en juego que podría incitar a aumentar los volúmenes de leche materna que se vende diluida con leche de vaca o artificial para ganar más", destaca Keim.
"Las madres que consideran comprar leche materna en internet deberían saber que representa un riesgo real para sus hijos", insiste.
Fuente: AFP