Ginebra. (EFE). La supervivencia de los corales del Caribe está fuertemente amenazada y los que quedan, en apenas una sexta parte de los arrecifes coralinos originales, pueden desaparecer en veinte años, advierte el informe más completo publicado hasta la fecha sobre esta cuestión.
Las principales razones de que la especie esté en peligro de extinción son el crecimiento explosivo de la población, la sobrepesca, la contaminación de las zonas costeras, el calentamiento global y las especies invasoras, según la investigación científica.
Se trata de una evaluación conjunta del Programa de la ONU para el Medioambiente y de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) en la que han participado 90 investigadores, que concuerdan en que más la mitad de los corales del Caribe han desaparecido desde los años setenta.
"El ritmo al que los corales del Caribe han disminuido es realmente alarmante", declaró el director de Programa Global Marine del UICN, Carl Gustaf.
REVERTIR LA SITUACIÓN
Sin embargo, su suerte no está echada, asegura el informe, que afirma que la reintroducción de peces loros (especie herbívora) y el mejoramiento de gestión de su hábitat pueden salvarlos.
La pérdida de ese pez -por una pesca excesiva el pasado siglo-, así como de erizos marinos -debido a una enfermedad desconocida que los diezmó en el siglo XX- es considerada una de las causas de la pérdida de corales en el Caribe.
La fuerte disminución de estas especies ha roto el delicado equilibrio del ecosistema de los corales y permite a las algas, de las que normalmente los corales se alimentan, ahogar los arrecifes.
Este último fenómeno había sido considerado como la causa principal de la degradación de los corales debido a que aumenta el nivel de acidez de los océanos y causa su blanqueamiento o pérdida de pigmentación.