Seis científicos han sido elegidos para pasar un año completo aislados en el hábitat de un domo que funciona con energía solar, construido en la isla de Hawái (EE.UU.). Este ambiente ha sido creado con el objetivo de simular las condiciones de un viaje a Marte.
Es la cuarta y hasta el momento la más larga de las misiones del proyecto de Analogía y Simulación de la Exploración Espacial en Hawái, un programa de la NASA para estudiar la exploración espacial prolongada. La última misión culminó el pasado 28 de julio, cuando los científicos salieron del domo tras pasar en su interior cuatro meses.
"Mientras más larga es la misión, mejor podemos entender los riesgos de los viajes espaciales", afirmó Kim Binsted, la principal investigadora del proyecto y profesora de la Universidad de Hawái en Manoa.
El objetivo es entender mejor qué involucran los viajes espaciales prolongados y cómo preparar a una tripulación para lo que se estima sería un viaje de tres años -entre ida y vuelta- a Marte.
Los seis participantes serán monitoreados usando cámaras de vigilancia, rastreadores de movimientos y encuestas electrónicas. Investigadores de la Universidad de Hawái, en Manoa, estudiarán la cohesión del grupo a través del tiempo y recolectarán información sobre factores cognitivos, sociales y emocionales que pueden impactar al equipo.
La tripulación del 2015-2016 será compuesta por Sheyna Gifford, una especialista en neurociencia, astrofísica y escritora científica; Tristan Bassingthwaighte, estudiante de arquitectura en Manoa cuyo trabajo doctoral involucra diseñar un hábitat conceptual de Marte; Carmel Johnston, una científica social de Montana que ha estudiado la producción de alimentos en las condiciones de Marte; Andrzej Stewart, un ingeniero aeronáutico que ha trabajado como controlador de vuelos interplanetarios para Lockheed Martin e ingeniero de vuelos para una simulación de la NASA; Cyprien Verseux, un astrobiólogo y experto en sistemas de soporte de vida biológicos para la exploración de el planeta rojo; y Christiane Heinicke, una física e ingeniera alemana.
La misión comienza el 28 de agosto y la NASA ya ha logrado el financiamiento para mantener el programa al menos hasta el 2018.