Royal Oak, Michigan. (AP). Ahora que Charlotte Ponce ha recuperado su oreja quiere usar accesorios. "Por fin puedo usar aretes", dijo la niña de 12 años desde la cama del hospital que ocupa en los suburbios de Detroit.
Charlotte, quien sufrió el ataque de un pequeño mapache cuando era una bebé de cinco meses, celebra la conclusión de dos años de trabajos reconstructivos de su cara.
Desde agosto de 2012 se le ha sometido a reconstrucción de la nariz, se reparó su labio y se le hizo una nueva oreja. La semana pasada se hizo un procedimiento en el brazo de donde se le tomó piel. A la niña se le había extraído cartígalo de una costilla para formar una oreja. El tejido se anidó debajo de la piel de su brazo antes de ser implantado.
El lunes, Charlotte, sus padres y el doctor que le practicó las operaciones analizaron los problemas que ha pasado. "Cumplí mi palabra. Le dije que le devolveríamos su nariz, su labio y su oreja", dijo el doctor Kongkrit Chaiyasate a la estación WXYZ-TV. De esta forma, culminan las cirugías de reconstrucción del rostro de Charlotte.
El mapache atacó a Charlotte en el 2002 cuando estaba en su cuna mientras sus padres biológicos vivían en la comunidad de Ravenna, al oeste de Michigan.
A ambos se les acusó de poseer un animal peligroso que causó serias lesiones a la menor y se les puso en libertad provisional. En 2005 el estado suspendió los derechos de paternidad de los padres biológicos de Charlotte. Luego de eso, ella y su hermano mayor Marshall fueron adoptados por Sharon y Tim Ponce, sus tíos abuelos.
La familia Ponce cree que el mapache, que fue sacrificado posteriormente, quería la botella de leche de Charlotte.