Nuestro sistema solar podría tener al menos un planeta más que aún no conocemos. Científicos de la Universidad de Burdeos han presentado una investigación donde afirman que un cuerpo celeste del tamaño de Urano podría estar a la deriva en la nube de Oort.
A través de una simulación, el equipo de investigadores, liderados por Sean Raymond, demostraron que un planeta podría haber sido “expulsado” hacia esta parte del sistema solar. “Se cree que las inestabilidades dinámicas entre los planetas gigantes son casi omnipresentes y culminan en la expulsión de uno o más planetas al espacio interestelar”, señala la investigación.
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Los científicos señalan que estos cuerpos celestes podrían estar ocultos en la Nube de Oort. “Aquí realizamos simulaciones de N-cuerpos de inestabilidades dinámicas mientras tomamos en cuenta los torques del campo de marea galáctico. Encontramos que una fracción de los planetas que de otro modo habrían sido expulsados están atrapados en órbitas muy amplias análogas a las de los cometas de la nube de Oort”, agrega.
Para entenderlo, la nube de Oort es la zona que se encuentra en los extremos del sistema solar. Es decir, es la parte que rodea a nuestro sistema planetario como una especie de caparazón. Al estar lejos de la estrella es considerado una “zona muerta”. Además, está compuesta de piezas heladas, desechos espaciales del tamaño de montañas o hasta más grandes. La nube de Oort podría contener miles de millones, o incluso hasta billones, de objetos.
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Según los investigadores, existen dos posibilidades para que un planeta haya sido expulsado hacia esta parte de nuestro sistema solar. La primera, la cual consideran la más factible con un 7% de probabilidad, es que un exoplaneta de otro sistema planetario con una gravedad “irregular” haya expulsado este cuerpo celeste. Así, habría llegado a la parte más lejana del nuestro y se ha quedado atrapado desde entonces.
La segunda, y menos probable con un 0,5%, es que este planeta haya formado parte del sistema solar en sus inicios y que, debido a que eran los “inicios del universo” y que aún se estaba “estabilizando”, por así decirlo, haya sido “expulsado” hacia la nube de Oort para quedar atrapado en esa zona.
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Esta hipótesis es parecida a la del llamado “Planeta X”, el cual se ve usualmente en historias de ciencia ficción. Este lleva ese nombre debido a que se asume que existe un décimo planeta del sistema solar, cuando Plutón era considerado uno, aún no descubierto y que se sugería que podría estar en el cinturón de Kuiper, zona que está mucho más cerca que la nube de Oort.
Sin embargo, la investigación solo apunta a que existe la posibilidad y que, de acuerdo a los experimentos realizados, podría tener el tamaño hasta de Urano. Debido a que la nube de Oort se encuentra muy lejos del Sol y prácticamente no recibe luz, actualmente es casi imposible confirmar que haya algún exoplaneta en esta zona. Pero, en caso hubiera uno, no supondría ningún peligro para la Tierra.
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