Ashton Kutcher causó revuelo en la bolsa de valores de Nueva York al protagonizar la tradicional ceremonia de apertura de la sesión para promocionar el estreno de su última película, Jobs, en la que encarna al fallecido cofundador de Apple, Steve Jobs.
El codiciado artista y ávido inversor estadounidense fue el encargado de hacer sonar el tradicional campanazo que da inicio a las cotizaciones en Wall Street, donde decenas de corredores de bolsa, periodistas y curiosos se agolparon para presenciar el momento.
Kutcher no se resistió a imitar a los corredores de bolsa sosteniendo dos teléfonos en el parqué como si estuviera ejecutando unas millonarias órdenes de compra, un mundo del que no es tan ajeno, puesto que a lo largo de los últimos años ha invertido en múltiples compañías como Skype, Foursquare, Path, Airbnb o The Hunt.
Vestido con un sobrio traje marrón y camisa azul, Kutcher acudió al parqué neoyorquino luciendo la misma barba que se ha dejado crecer para meterse en la piel de Steve Jobs en este filme que se centra en los inicios de la carrera del creador del iPhone en Silicon Valley.
La película, que se estrenará el próximo 16 de agosto en Estados Unidos, ha sido dirigida por Joshua Stern y ha generado gran expectación por tratarse de la vida del no falto de polémica Steve Jobs, quien falleció en octubre de 2011 tras una larga batalla contra el cáncer.