La Caleta: el ‘point’ de pizzas y pastas que se esconde en la avenida La Mar presenta nueva carta para el verano

Quien ha visitado Brooklyn alguna vez, entiende muy bien que el espíritu de ese ‘borough’ o distrito de la ciudad de Nueva York (en supertendencia desde hace varios años) nace de su pluralidad cultural. En Lima —con todas las distancias y diferencias del caso— también tenemos la suerte de contar con espacios ricos en influencias de todos los rincones del mundo, fértiles en oferta culinaria para disfrutar y explorar. Entre ellos, la avenida La Mar nunca deja de sorprender. Hay de todo, y casi todo es bueno. Basta con dar una vuelta y tener los ojos bien abiertos: a veces, son los pequeños locales los que regalan las mayores sorpresas.

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El proyecto de La Caleta empezó justamente en la caleta de la playa Bujama, en el año 2019 (de ahí el nombre). En 2021 entró como socio José Alfredo Aramburú y, tras la apertura del local de Miraflores, el concepto se consolidó como un restaurante casual de pizzas y pastas, inspirado en el estilo de las pizzerías de barrio ubicadas en Brooklyn. Allí, buscan que la experiencia en la mesa sea protagonista, con platos que únicamente se pueden probar en el local de manera presencial. Las estrellas de la casa son, por supuesto, las pizzas.

“Nos enfocamos en la calidad de los insumos y la procedencia, como los tomates San Marsano o el uso de harina italiana”, sostiene Aramburú. “Para las pizzas tenemos dos masas: la clásica, que es superdelgada, y una segunda masa hecha de masa madre con fermentación de 48 horas”, indica. Desde una ‘meat lover’ hasta la ‘cheesy cheese’, una especie de fugazza con tres clases de quesos: las opciones son variadas y varias de ellas pueden probarse por rebanada.

Más allá del horno, también nos encontramos con opciones interesantes en pastas, como unos panzotis de alcachofa con salsa blanca y trufa, o unos ‘socarrat’ putanesca, fideos ligeramente crocantes con la famosa salsa a base de anchoas y aceitunas. También tienen una nueva carta de cócteles, que incluye una sección de spritz, vermuts y limoncello de la casa, además de postres y tostones. Para los niños ofrecen la posibilidad de armar su propia pizza en la mesa, estirando la masa y eligiendo sus ingredientes preferidos. La idea por aquí es que todos los antojos sean satisfechos.//