A pesar de los esfuerzos de la policía la inseguridad campea en Tumbes. (Foto:Lino Chipana/Archivo)
A pesar de los esfuerzos de la policía la inseguridad campea en Tumbes. (Foto:Lino Chipana/Archivo)

Los 220 mil habitantes de Tumbes empiezan a vivir con miedo. Segn las estadsticas de la polica, el ndice de homicidios por ajuste de cuentas se ha disparado en los ltimos aos.

Los nmeros grafican por s solos la triste realidad que vive la regin fronteriza. Entre enero y diciembre del 2011, hubo 13 asesinatos por ajuste de cuentas. Durante el 2012, la cifra en el mismo perodo del ao alcanz los 30 casos.

El ao siguiente los homicidios por encargo se incrementaron a 60 y, en lo que va del 2014, ya han muerto 13 personas en manos de sicarios. De estos ltimos, cinco casos fueron registrados en los tres primeros das del ao y ninguno tiene responsables ni procesados.

A diferencia de lo que suceda en aos anteriores cuando solo se reportaban amenazas, los atentados de los ltimos tres aos revelan una plena intencin de matar. En la totalidad de los casos, los testigos vieron a dos delincuentes (de entre 17 y 19 aos) llegar en una moto. Uno de ellos, sin dejarse ver el rostro, dispara hasta 8 veces contra el agraviado.

Con sus 4.669 kilmetros cuadrados, Tumbes es la regin ms pequea del pas, pero su ubicacin, cerca de la frontera con Ecuador, la convirti en el caldo de cultivo de actividades delictivas, como el contrabando y la trata de personas. Poco a poco las mafias fueron formando grupos dispuestos a extorsionar a los pocos empresarios y comerciantes que apostaban por la regin.

Lucha de cupos

Los Walas, el Sordo Vite, Los Antn, Los Pollos y la banda del Cara de beb siembran el terror en esta regin. Se dedican a la extorsin y al sicariato, segn la polica. Muchos adolescentes, al ver que los delincuentes se dan la gran vida, piden ingresar a sus bandas para tener un estilo de vida similar, comenta el consejero regional Cristian Palacios.

Palacios, a quien los extorsionadores llaman Gato por el color de sus ojos, muestra los mensajes de su celular. Le pedan S/.15.000. El funcionario nunca cedi, como s lo han hecho por temor otros empresarios langostineros. Sin embargo, se vio obligado a enviar a toda su familia a otra ciudad.

Su caso se sum al del jefe regional del Instituto Peruano del Deporte (IPD), Adrin Ramrez, cuya casa fue atacada en dos ocasiones, y al de dos catedrticos de la Universidad Nacional de Tumbes. Ellos han sido los nicos que han denunciado las extorsiones.

Algo empieza a oler mal

En los ltimos meses las amenazas ya no estn dirigidas a los empresarios locales. De pronto hombres de prensa y autoridades crticas a la gestin de Gerardo Vias, el presidente regional, empezaron a ser amedrentados.

El mes pasado, la periodista rsula Pinedo fue atacada por dos mujeres en la puerta del canal de televisin donde trabaja, en el centro de Tumbes.

La golpearon y la amenazaron de muerte. Deja de investigar a Vias, porque de lo contrario te ir peor, le dijeron. Ese acto vandlico se sumaba a las decenas de intimidaciones, llamadas y agresiones verbales y fsicas que ha recibido ella y otros periodistas tumbesinos.

Lo grave del asunto es que la denuncia policial de Pinedo no sirvi de nada. Pese a que identific a sus agresoras, las hermanas Alba y Esmeralda Garca, conocidas como Las Pacazas, hasta ahora la investigacin no avanza y Pinedo teme que se archive.

Actualmente, el acceso a la sede regional es restringido, aun siendo una institucin pblica. Los das de atencin solo son lunes, mircoles y viernes. Sin embargo, hay decenas de periodistas y ciudadanos, a quienes los vigilantes por rdenes superiores no los dejan ingresar, aun durante los das que s est permitida la entrada.

Una periodista, que por su seguridad prefiere no revelar su identidad, denuncia haber recibido frases intimidatorias de los propios vigilantes del Gobierno Regional de Tumbes, como: Prtate bien. Son rdenes del jefe, me pagan por eso.