Pese a que cinco trenes nuevos están listos para circular en la Línea 1 del Metro de Lima y cuentan con la certificación técnica del Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositrán), aún no entran en operación comercial debido a un entrampamiento de índole financiero.

Según explicó a El Comercio Manuel Carrillo, gerente de Regulación del Ositrán, falta que la empresa concesionaria GyM Ferrovías y el Ministerio de Transportes y Comunicaciones sustenten ante la entidad supervisora 14 modificaciones financieras al contrato original, propuestas en una adenda que ha sido sometida a la opinión del organismo.

Entre los cambios propuestos y observados por Ositrán figuran el aumento del subsidio del Estado a la operación y el mantenimiento, y el proceso de colocación de bonos en oferta no pública. La opinión del Ositrán no es vinculante para el MTC.

Según fuentes de GyM Ferrovías, mientras no se asegure el financiamiento y no se firme la adenda, los nuevos trenes no pueden circular. Patricia Benavente, presidenta del Ositrán, confirmó que CAF y BNP Paribas ya han sido considerados acreedores permitidos de la concesión, según contrato. Se supo que GyM pretende vender bonos para pagar los créditos.