La jueza del Tercer Juzgado Civil de Chiclayo, Eve Redruello, tuvo que escapar de una turba de ex trabajadores de la azucarera Pucalá, quienes irrumpieron en las instalaciones de la sede judicial para amedrentar y presionar a la magistrada que tiene pendiente una resolución sobre el caso.
Según informó Zonia Custodio, corresponsal de El Comercio en Chiclayo, poco más de 50 hombres llegaron al juzgado Civil del Poder Judicial. Treinta y cinco de ellos llegaron al despacho de Redruello y la retuvieron durante casi dos horas. La jueza dijo que recibió insultos e incluso intentaron agredirla.
Redruello tuvo que huir por una puerta falsa y solicitó custodia policial. El hecho sucedió poco antes de 9:00 a.m. Los trabajadores buscan presionar a la jueza para esta emita una resolución que autorice la creación de una nueva junta administrativa en la azucarera.