Después de 33 años de interpretar a Jesús en su Vía Crucis durante la Semana Santa en Lima, el actor Mario Valencia se retiró hoy de ese papel con su última crucifixión en el cerro San Cristóbal, rodeado de miles de fieles.

Valencia cargó por última vez una pesada cruz de madera durante un largo recorrido en el que encarnó el sufrimiento de Jesús en cada una de las 14 estaciones hasta llegar a lo alto del empinado cerro desde donde se observa toda la ciudad.

El actor declaró a la prensa que había pasado mucho tiempo en ese rol que requería de mucho esfuerzo físico y que el periodo en que lo interpretó era equivalente a los años que vivió Cristo.

Durante la ascensión por el populoso cerro, los acompañantes portaban velas, rezaban y entonaban cantos en medio de un ambiente fervoroso.

Antes de expirar en la cruz, Valencia hizo un alto para despedirse del público, para después entregarse al final de su acto.

En otros puntos de Lima y del Perú también se escenificaron escenas del Vía Crucis, donde se interpretó con mucha vehemencia el sacrificio de Cristo.