Eva Bracamonte tuvo un accidentado ingreso a su casa ubicada en San Isidro, lugar donde la empresaria Myrian Fefer fue asesinada en 2006. En un primer intento, la joven no pudo bajar del vehículo que la trasladaba debido al gran número de periodistas que la esperaban en las afueras de la vivienda y que incluso lograron ingresar una vez que se abrió el portón.
Tras abandonar el Penal de Mujeres de Chorrillos, la camioneta llegó a la calle Paul Harris y solo el descontrol se abrió paso. Los reporteros ingresaron a la casa y no dejaron bajar a la joven.
Los policías retiraron a los medios de prensa mientras el auto conducido por Marco Bracamonte salió de la casa. El vehículo que trasladaba a Eva Bracamonte y July Naters dio varias vueltas por las calles cercanas para finalmente regresar al domicilio.
A través de las ventanas se podía ver a una Eva nerviosa y bastante cansada. Minutos después, su padre dijo que su hija “no había podido dormir hace dos días”.
Finalmente, Eva pudo bajar e ingresar a la casa gracias a un cordón policial.