Nueva onda de calor en México: cuál será temperatura y qué estados afectará | En esta nota te contaremos los detalles que debes tener en cuenta en relación a esta situación climatológica que vivirá México. (Archivo)
Nueva onda de calor en México: cuál será temperatura y qué estados afectará | En esta nota te contaremos los detalles que debes tener en cuenta en relación a esta situación climatológica que vivirá México. (Archivo)
Redacción EC

Gran preocupación viene atravesando millones de ciudadanos en debido a una alerta que realizaron las principales fuentes meteorológicas del país; que estiman un panorama muy caluroso producto de una onda de calor que se verá reflejada en varios estados del territorio azteca. Es por ello que en esta nota te contaremos los detalles que debes tener en cuenta en relación a esta situación climatológica.

CUÁL SERÁ LA TEMPERATURA EN MÉXICO Y QUÉ ESTADOS SE VERÁN AFECTADOS

Según la información compartida por el Servicio Meteorológico Nacional de México, se aproxima una onda de calor, que podría haberse empezado a sentir desde el pasado 3 de mayo en el territorio azteca.

Las estimaciones indican que México podría atravesar temperaturas máximas de hasta 40 a 45 grados en al menos 12 estados del país.

Las entidades especialistas en meteorología señalan que la onda de calor afectará los siguientes estados de México:

  • Campeche
  • Chiapas
  • Colima
  • Guerrero
  • Jalisco
  • Michoacán
  • Nayarit
  • Oaxaca
  • Sinaloa
  • Tabasco
  • Veracruz
  • Yucatán

Una onda de calor es un fenómeno meteorológico que ocurre cuando las temperaturas alcanzan niveles inusualmente altos durante un período prolongado de tiempo. Este evento climático puede tener un impacto significativo en la salud y el bienestar de las personas, especialmente de aquellos que son más vulnerables como los ancianos, los niños pequeños y las personas con problemas de salud preexistentes.

Durante una onda de calor, el aire caliente y seco se desplaza sobre una región, aumentando la temperatura ambiente y reduciendo la humedad relativa del aire. Esto puede hacer que sea difícil para el cuerpo disipar el calor, lo que puede llevar a una serie de problemas de salud, incluyendo deshidratación, golpe de calor, agotamiento por calor, problemas respiratorios y otros problemas médicos.

Los síntomas de una onda de calor pueden incluir sudoración excesiva, piel enrojecida y caliente, mareo, náuseas, fatiga, calambres musculares y dolor de cabeza. Las personas mayores y aquellas con afecciones médicas preexistentes como enfermedades cardíacas, pulmonares o renales son especialmente vulnerables a los efectos de una onda de calor.

Es importante tomar medidas preventivas durante una onda de calor para evitar problemas de salud. Esto incluye beber mucha agua para mantenerse hidratado, evitar la exposición al sol durante las horas más calurosas del día, usar ropa ligera y de colores claros, usar protectores solares, buscar lugares con aire acondicionado y reducir la actividad física al aire libre. Las personas que trabajan al aire libre, como los agricultores y los trabajadores de la construcción, deben tener especial cuidado y tomar descansos regulares en lugares frescos y sombreados.

Los gobiernos y las organizaciones de salud pública también toman medidas para proteger a las personas durante una onda de calor. Pueden emitir alertas de salud y recomendar que las personas permanezcan en lugares con aire acondicionado, como centros comerciales, bibliotecas o centros comunitarios. También pueden proporcionar asistencia a personas mayores o de bajos ingresos que no tienen acceso a un lugar fresco o a un aire acondicionado.

Las ondas de calor se han vuelto más comunes y más intensas debido al cambio climático. Según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, el número de días de calor extremo en el país ha aumentado significativamente en las últimas décadas. Además, las ondas de calor también pueden tener un impacto económico significativo, ya que pueden afectar la producción agrícola, aumentar la demanda de energía para el aire acondicionado y aumentar el riesgo de incendios forestales.

RECOMENDACIONES A TENER EN CUENTA FRENTE A LAS ALTAS TEMPERATURAS

Ante las altas temperaturas climatológicas, es importante tomar medidas para prevenir problemas de salud relacionados con el calor. Algunas recomendaciones son las siguientes:

  • Beber suficiente agua: Es fundamental mantenerse hidratado durante los días calurosos. Se recomienda beber agua y otras bebidas frescas sin alcohol o cafeína, y evitar el consumo de bebidas azucaradas.
  • Usar ropa adecuada: Es importante usar ropa ligera y de colores claros para mantenerse fresco y cómodo. Se recomienda usar ropa holgada y de telas transpirables, que permitan la circulación del aire y absorban la humedad.
  • Buscar lugares frescos: Se debe tratar de permanecer en lugares frescos y sombreados, como edificios con aire acondicionado o parques con árboles. Si no se cuenta con aire acondicionado en casa, se pueden utilizar ventiladores y enfriadores de aire para refrescar el ambiente.
  • Evitar la exposición directa al sol: Se recomienda evitar la exposición directa al sol durante las horas más calurosas del día, entre las 11:00 y las 16:00 horas. Si es necesario estar al aire libre, es importante usar protección solar y un sombrero o sombrilla para protegerse del sol.
  • Reducir la actividad física: Es importante evitar realizar actividades físicas extenuantes durante los días calurosos, ya que el exceso de calor y la deshidratación pueden causar problemas de salud. Se recomienda realizar actividades físicas moderadas en lugares frescos y bien ventilados.
  • Vigilar los síntomas de deshidratación: Es importante estar atento a los síntomas de deshidratación, como sed, boca seca, fatiga, dolor de cabeza y mareos. Si se presentan estos síntomas, es importante tomar líquidos y buscar un lugar fresco para descansar.
  • Proteger a los niños y ancianos: Los niños pequeños y las personas mayores son especialmente vulnerables a los efectos del calor. Es importante protegerlos y asegurarse de que beban suficiente agua y permanezcan en lugares frescos y sombreados.
  • Mantener los alimentos frescos: Es importante mantener los alimentos frescos y refrigerados para evitar la descomposición y la proliferación de bacterias. Se recomienda evitar comer alimentos que se hayan dejado a temperatura ambiente durante mucho tiempo.