Panadería Central: el espacio donde reina el café de especialidad y la bollería

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“Cuando empezamos, el concepto de cafetería era diferente. La gente pensaba en un lugar para almorzar o tomar un café negro clásico, no en un espacio donde el café fuera la estrella”, comenta a Provecho Jayme Cornejo, gerente de Panadería Central.

La visión original incluyó un local amplio en San Isidro, pensado para un público corporativo, pero la pandemia cambió el rumbo. La marca tomó una decisión clave: “Nos mudamos a un local más pequeño y decidimos enfocarnos en el café de especialidad. Aprendimos que el café puede contar historias y queríamos ser parte de eso”, explica.

El concepto de café de especialidad que manejan se basa en la calidad del grano y su origen. Trabajan con granos cultivados a más de 1,800 metros sobre el nivel del mar, ofreciendo variedades como el Caturra Amarillo, que es de la planta arábica original. Las zonas de las cuales obtienen los granos de café son de Cajamarca y Cusco.

La diferencia, según comenta Jayme, también está en el tostado. “Nosotros buscamos resaltar los sabores naturales del grano como los florales o frutales, que quizás no son lo que el cliente peruano está acostumbrado, pero son parte de esta experiencia”, menciona.

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Más allá del café

Aunque el café es el protagonista, la experiencia y presentaciones en Panadería Central también incluyen desayunos completos con panes, sándwiches y opciones de bollería que complementan la visita. “Desde el inicio, queríamos un lugar donde disfrutar un buen desayuno. Eso sigue siendo parte de nuestro ADN”, afirma Jayme.

Uno de los pilares de su oferta es el pan, el mismo que es elaborado con masa madre y fermento natural. Este no solo destaca por su sabor y textura, sino también por sus beneficios para la salud cuando tienen comensales que podrían tener sensibilidad al gluten.

El menú de sándwiches está diseñado para satisfacer todos los gustos, desde los clásicos hasta los más innovadores. Una de las opciones favoritas es el sándwich de jamón de pavo, preparado con una salsa artesanal de pimientos y aceite de oliva, servido en focaccia. “La pechuga de pavo es procesada por nosotros para crear un jamón que no tiene nada que envidiarle a los comerciales, al contrario, tiene un sabor más rico y auténtico”, afirma Jayme.

Otra opción destacada es el croissant con pollo, una combinación que ha conquistado a su público, según los estudios del negocio. Además, es un imperdible cuando de cafeterías se trata.

Por otro lado, la bollería es uno de sus puntos fuertes. Los cruffins son una experiencia única de sabores por el hojaldrado y los diferentes sabores de relleno que tienen, como la crema de pistacho. Además, el cinnamon roll es una de las estrellas y uno de los más pedidos en el local.

Innovación constante

La propuesta no solo se centra en el sabor, sino también en la experiencia. “La gente ama nuestros sándwiches, y una de las razones es la versatilidad. Puedes llevar el pan a casa, calentarlo y disfrutarlo como recién hecho. Es parte de nuestro esfuerzo por crear un vínculo con nuestros clientes, dándoles algo único y memorable”, menciona Jayme.

Además, se vienen nuevos proyectos para ellos, pues están a puertas de abrir un taller en Surquillo en el que se centrarán en mantener la calidad de todos los granos de café que, posteriormente, utilizarán en sus bebidas; ellos mismos serán quienes tuesten el café que ofrecerán en sus dos locales.

Con una oferta que combina panadería artesanal, sándwiches innovadores y café de especialidad, Panadería Central se posiciona como un lugar imprescindible para quienes buscan calidad y autenticidad en cada bocado.

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