El fiscal de la Nación interino, Pablo Sánchez Velarde, consideró que los casos emblemáticos de corrupción, como ‘La Centralita’ y la investigación al abogado Rodolfo Orellana, “siguen generado alarma social”.
Así lo expresó durante su discurso por el 34° aniversario del Ministerio Público y Día del Fiscal.
Sánchez dijo que la institución que él conduce había puesto su “mayor interés en la lucha contra la corrupción, el crimen organizado y el lavado de activos”.
“Ello se debe a los casos llamados emblemáticos, que son aquellos que siguen generando alarma social. Hemos apoyado el trabajo de investigación fiscal en los casos denominados ‘La Centralita’, Orellana y de otros casos de corrupción”, dijo Sánchez Velarde.
En la ceremonia participó el presidente Ollanta Humala, cuyo ex asesor de campaña, Martín Belaunde Lossio, es uno de los procesados por el Caso ‘La Centralita’. En esta investigación fiscal se indaga por el desvío de fondo públicos del gobierno regional de Áncash.
Pablo Sánchez consideró que la extradición de Belaunde Lossio era una de las “más emblemáticas”, junto a la del argentino de Mauro Nicolas Fernandez, por el Caso Greenpeace.
“La nuestra no es una institución política”, dijo el fiscal de la Nación, y aseguró que los magistrados del Ministerio Público deben “actuar sin aceptar ningún tipo de presión ya sea política, económica o mediática”.
Quien no estuvo presente en la ceremonia fue el suspendido fiscal supremo Carlos Ramos Heredia, quien debió dejar el cargo de fiscal de la Nación a inicios de año debido a los vínculos que habría tenido con la red de Rodolfo Orellana y de César Álvarez (principal implicado en el Caso 'La Centralita').
Precisamente esta situación, a las que Sánchez aludió como "circunstancias especiales", generaron la suspensión de Ramos Heredia, quien fue reemplazado en el cargo de fiscal de la Nación por Pablos Sánchez. "[Esto] no lo propicié ni me aferro al cargo. Solo cumplo con la ley", acotó el encargado de conducir el Ministerio Público.