La mañana de este viernes 21 de abril, Alejandro Toledo, expresidente peruano que permaneció prófugo en Estados Unidos desde el 2017, se entregó a las autoridades norteamericanas para que se lleve a cabo el proceso de extradición en su contra.
Las últimas imágenes captadas del exmandatario en libertad lo muestran saliendo de su domicilio y abordando un vehículo de lunas polarizadas con varias maletas y vistiendo una casaca larga color verde oscuro. Toledo Manrique se percató que lo grababan pero evitó declarar, como se puede ver en el video difundido por TV Perú.
El expresidente estuvo acompañado por su esposa, la exprimera dama Eliane Karp, y por su abogada Mara Goldman, al momento de bordar el vehículo negro.
En un primer momento, se especuló que se trasladaría a la sede de la Corte Federal de San José, en California, donde el juez Thomas Hixson había dispuesto que se lleva a cabo su detención para proceder con su extradición.
Sin embargo, fuentes de El Comercio confirmaron que Toledo se entregó a las autoridades en una sede judicial diferente, donde no había presencia de medios de comunicación esperándolo.
Un día antes, en su última entrevista antes de su extradición desde Estados Unidos ante la agenda EFE, Alejandro Toledo reiteró su inocencia y pidió que, si bien se iba a entregar para ser extraditado al Perú, la justicia varíe su prisión preventiva por un arresto domiciliario.
“Le pido a la justicia peruana que no me mate en la cárcel, déjenme luchar con argumentos”, dijo Toledo Manrique.
“Mi salud es muy mala. Tomo 14 pastillas diarias, tengo hipertensión y sufro por los remanentes del cáncer (...) Solo respeten eso, no han probado nada y ya me quieren meter en la cárcel”, agregó.