La presidenta Dina Boluarte brindó un discurso con una extensión de 79 páginas, con una serie de anuncios en distintos sectores. Con el fin de tener un análisis integral del mensaje a la nación, El Comercio convocó a cinco gobernadores y cinco alcaldes para conocer sus impresiones y brinden una calificación. La presidenta obtuvo 13.8 como nota promedio de parte de las autoridades subnacionales.
Los gobernadores convocados para esta evaluación son Zósimo Cárdenas (Junín), Antonio Pulgar (Huánuco), Richard Hancco (Puno), Luis Neyra (Piura) y Gilmer Horna (Amazonas). Por el lado de los alcaldes, tenemos a los provinciales Víctor Hugo Rivera (Arequipa) y Aliardo Aguirre (Marañón), así como los distritales Hernán Sifuentes (San Martin de Porres), Nancy Vizurraga (San Isidro) y Jhovinson Vásquez (Ventanilla, Callao).
Así califican los gobernadores al mensaje a la nación
Las regiones estuvieron presentes en el discurso de la presidenta Dina Boluarte, y Junín obtuvo 17 menciones, dándonos la relevancia que nos merecemos como polo de desarrollo económico para el país. Ha sido importante escuchar anuncios sobre la adjudicación de la Longitudinal de la Sierra – Tramo 4, pero no dio mayores detalles sobre la Nueva Carretera Central Daniel Alcides Carrión, que es de vital importancia para la conectividad de las regiones como Junín.
El anuncio sobre nuevo Ministerio de Infraestructura suena bien en el papel, pero este deberá mostrar un trabajo junto a los gobiernos regionales y locales. De lo contrario, fracasará como la Autoridad de Infraestructura que tiene poco tiempo y escasos resultados. Esta iniciativa debe ser aprobada por el Congreso con carácter de urgencia. Requerimos que este nuevo ministerio se centre en la conectividad y trabaje de manera específica con las regiones. En Junín, por ejemplo, requerimos que atienda nuestros pedidos de partidas presupuestales para cerrar brechas en salud con un hospital de alta complejidad en el Mantaro, el hospital de la provincia de Junín, el hospital de Jauja y el hospital de Concepción; en educación, con un Colegio de Alto Rendimiento y otros colegios emblemáticos; y en conectividad, con la carretera de Ulcumayo a San Ramón.
Nuestro Plan Bicentenario Junín busca que este año no sea solo conmemorativo, sino que marque un antes y después en el desarrollo de la región. Sin inversión, no hay desarrollo.
Nuestro bicentenario es la oportunidad para implementar una real descentralización y el anunciado Ministerio de Infraestructura tenga su sede principal en una región clave como Junín. Sería una gran señal de cambio y una acción que daría un mensaje potente de trabajo conjunto por el desarrollo del país.
El punto débil del mensaje fue la seguridad, pues el cambio de nombre del ministerio no ayudará mucho en la lucha contra la delincuencia. Esperamos que en los próximos meses se presente un plan más articulado en este sector.
Huánuco se hizo sentir en el discurso presidencial. Queda claro que, luego de un arduo trabajo para hacer saber nuestras demandas, estas fueron escuchadas. En el mensaje, el anuncio de la licitación de la carretera Puente Rancho Panao-Chaglla para este año, una obra emblemática que beneficiará a miles de agricultores y transportistas, ha sido una grata noticia, al igual que el proyecto de Ambo Yanahuanca Oyón y Siguas Huacrachuro Huchiza.
Asimismo, el inicio de una etapa del tramo Pasco-Tingo María ahora tiene fecha clara. Sin embargo, una de las ausencias notables ha sido el mantenimiento de la carretera Huánuco Tingo María y Pro Región 2; que beneficiarían a 84 distritos y 11 provincias de nuestra región.
Si bien, el mensaje ha sido positivo, aún existen una gran brecha de infraestructura y servicios que siguen siendo un desafío en nuestra región. Crear el Ministerio de Infraestructura destrabaría mucho.
La descentralización es crucial para el desarrollo equitativo de nuestro país. Las regiones no podemos seguir siendo olvidadas. Huánuco estará vigilante, asegurándose de que estas palabras no se queden en solo promesas. Esperamos pronto tener más claridad sobre los proyectos anunciados y no tengamos que mendigar reuniones para conversar sobre ellos. Ese será el mejor regalo para conmemorar los 485 años de fundación de nuestra querida región.
Después de escuchar el mensaje presidencial, es necesario mencionar algunos proyectos que necesitan celeridad. Uno de ellos es la Ruta 2, que conectará el Perú con Brasil mediante la vía interoceánica IRSA Norte, uniendo Piura, Lambayeque, Cajamarca, Amazonas, San Martín y Loreto. Este corredor de 3500 km transportará más de 3 millones de toneladas al año, afianzando la carga a los puertos de Paita, Etén y Chancay. Además, se propone crear parques industriales, mineros, tecnológicos y de energías renovables, impulsando el crecimiento económico en la región nororiental del Perú.
En agua y saneamiento, la presidenta busca invertir, pero se necesita agilizar los procesos para mejorar las infraestructuras colapsadas de hace más de 15 años. En salud, es crucial fortificar todo el arroz con ácido fólico y hierro para combatir deficiencias nutricionales.
La educación técnica debe incluir inglés y considerar el chino mandarín en regiones con terminales marítimos. Se debe priorizar el apoyo a las universidades existentes antes de pensar en crear nuevas casas de estudio.
Es urgente resolver el financiamiento de las obras de la reconstrucción con cambios paralizadas. Lambayeque apoya con el terminal marítimo de Etén y pide firmar la adenda con IRSA Norte para conectar el corredor bioceánico y alimentar el puerto de Chancay mediante cabotaje. El nororiente del Perú tiene todo para crecer económicamente y plantear un cierre de brechas con eficiencia en el gasto público.
Si bien el mensaje presidencial fue un recuento de acciones y decisiones, se rescata el anuncio de lo que ya era un secreto a voces: el acuerdo con el gobierno de Japón para la construcción de la carretera que unirá Amazonas con Loreto. El reto va más allá de la firma y requiere un total compromiso del Ejecutivo para que este proyecto culmine de manera exitosa.
En este mensaje, el gobierno central ha considerado a Amazonas como una de las regiones prioritarias para atender. Una decisión clave y urgente debido a la complejidad de su geografía, su multiculturalidad y el reducido presupuesto que recibe en comparación de otras regiones. Amazonas no tiene canon y esa es una desventaja. Necesita de recursos e inversión.
Somos conscientes que debemos atraer inversión privada y Amazonas tiene un enorme potencial turístico y agrícola para lograrlo, pero es necesario que el gobierno, a través de sus ministerios, continúe apoyándonos para mejorar las prestaciones de los servicios básicos y el acceso aéreo y terrestre.
Una reflexión final. Amazonas requiere especial atención a las comunidades nativas de Condorcanqui, donde la precariedad es notoria. Como gobierno regional estamos trabajando en la zona, construyendo residencias estudiantiles, centros de salud y más; pero no es suficiente, queremos una mayor participación del gobierno nacional.
No podemos ser mezquinos: el Gobierno Nacional ha logrado algunos avances en este primer año y medio de gestión. En Piura, hemos recibido con esperanza el compromiso para ejecutar importantes iniciativas, largamente postergadas, en esta región que congrega a la mayor cantidad de ciudadanos a nivel nacional.
En su discurso, la presidenta mencionó proyectos como el Alto Piura, el Hospital de Alta Complejidad, el Puente Carrasquillo, once puentes Tambogrande-Morropón, el Proyecto de Agua Potable y Alcantarillado de 105 asentamientos humanos de Piura Metropolitana, el reimpulso de las obras de saneamiento en la provincia de Sullana, un laboratorio de criminalística, y el mejoramiento de comisarías, entre otros; propuestas que nos devuelven la esperanza de ser escuchados.
Sin embargo, persisten temas pendientes como los “créditos blandos” para pequeños y medianos agricultores, pescadores artesanales y acuicultores, afectados por recientes fenómenos climáticos, y el incremento de la asignación presupuestal para el pago de la deuda social para los maestros. Temas que pedimos al gobierno también tome en consideración.
Hoy, es responsabilidad de quienes ocupan el Ejecutivo convertir estas palabras en hechos y en plazos cumplidos; que no queden en solo promesas. Es vital que se recupere la confianza de la población y se fortalezca la unidad de nuestro país.
Así califican los alcaldes al mensaje a la nación
El cambio de denominación del Ministerio del Interior a “Ministerio de Seguridad Pública” no va a resolver el grave problema de delincuencia que afronta Lima. Nuevamente, el gobierno se equivoca al creer que medidas de forma y temporales -como lo fue en su momento la declaratoria del estado de emergencia- ayudarán a la lucha contra la delincuencia y criminalidad. Lo que se requiere es un plan integral y no encontramos esbozo de ello en las 79 páginas del discurso.
Tener más efectivos policiales en las calles es un importante anuncio, pero es momento de que el gobierno establezca un trabajo coordinado donde los municipios no se vean obligados a pagar por el día de franco de los policías. Esperamos que los programas “Amanecer Seguro” y “Retorno seguro” sean constantes, y desde San Martín de Porres nos ponemos a disposición para implementarlos en nuestra jurisdicción.
Saludo que la presidenta Boluarte haya tomado a nuestro distrito como ejemplo, tanto en el caso de la unidad de flagrancia que serán replicadas en otras zonas del país, y el Grupo Especial Contra el Crimen Organizado de Inteligencia que es similar a la Brigada de Lucha contra la Criminalidad que constituimos en San Martín de Porres.
La gran omisión del mensaje fue el plan de rescate para las municipalidades endeudadas por gestiones anteriores. El Ministerio de Economía anunció que se tomarían acciones, pero hasta la fecha no se han dado los lineamientos, y esto perjudica la labor de varias autoridades subnacionales.
Siendo la inseguridad ciudadana, sin duda alguna, una de las principales problemáticas que afrontamos como país, el mensaje presidencial pudo ser más contundente y profundo en los anuncios presentados respecto a este tema.
El cambio de nombre al Ministerio del Interior, los proyectos de incremento salarial para el personal policial, los mega operativos y la repotenciación de las labores de inteligencia, serán siempre anuncios bienvenidos, pero siguen siendo acciones aisladas que no resuelven el problema de fondo.
Nuestra Policía Nacional necesita con urgencia ser fortalecida como institución y para ello deben canalizarse los esfuerzos del Estado que mejoren las condiciones laborales de sus efectivos, con sueldos dignos sostenibles y capacitación permanente, y otras acciones que le levanten la moral para que puedan ejercer eficientemente su labor en la lucha contra la delincuencia.
Reformular el sistema nacional de la seguridad ciudadana requiere de decisión política para dar los primeros pasos y se ha dejado de lado una plataforma importante en este mensaje para plantearlo al menos como una etapa de debate.
Sin embargo, la presidenta cuenta aún con el tiempo de lo que le queda a su gobierno para establecer acciones claras y concretas que permitan sentar las bases de los cambios que se necesitan, con la participación de todas las entidades involucradas, entre ellas los gobiernos locales, donde nosotros como alcaldes somos la primera línea de atención a la demanda ciudadana.
La inseguridad aún es un tema prioritario para el país, saludamos que se realicen los operativos “amanecer seguro”, pero se necesita de un trabajo articulado con el Poder Judicial y el Ministerio Público. Resalto la intención de la presidenta Dina Boluarte, de promover la inversión privada en la actividad económica y confiamos que se realizará de manera transparente y sin corrupción.
Para el Callao, la inauguración del mega puerto de Chancay, será clave para dar pase a oportunidades de infraestructura y por ello, exhorto al Ministerio de Transportes, inicie el proyecto de mejoramiento del kilómetro 3.5 de la avenida Néstor Gambeta. La tan esperada construcción de la Vía Expresa Santa Rosa, permitirá mejorar el tránsito y traerá modernidad y transitabilidad al Callao.
Pero sin duda, como ventanillence, anhelo se concrete el “mejoramiento y ampliación de los sistemas de agua potable y alcantarillado de diversos sectores en el distrito de Ventanilla”. Con mis vecinos, esperamos desde hace 17 años se inicie la aprobación de este megaproyecto.
El mensaje de la presidenta Boluarte ha sido muy extenso. Es importante su anuncio de que no se privatizará el agua potable. Igualmente, es crucial que en el futuro se garantice que tampoco habrá aumento de las tarifas, como advirtió Sunass.
Para Arequipa, es fundamental el anuncio sobre el hospital Goyeneche, que se construirá mediante el mecanismo de gobierno a gobierno. Nuestra ciudad enfrenta un déficit en la atención de la salud y nuevos hospitales mejorarán la calidad de vida de los ciudadanos. El traspaso de Majes Siguas II al gobierno será beneficioso si es destrabado y se concretan las 38.500 hectáreas para la agroindustria, generando empleo para 350,000 peruanos.
Sobre Tía María, agro y minería pueden coexistir, como ocurre en otros países; sin embargo, se debe garantizar que no habrá impacto ambiental y compensar a los agricultores con una represa. Eso asegura el suministro de agua.
El mensaje tuvo algunos vacíos, faltó lo de la descentralización fiscal. Urge que las regiones y municipios cuenten con más recursos para solucionar problemas críticos, como el transporte urbano. En Lima hay inversiones millonarias, S/ 17,000 millones destinados a la Línea 2 del Metro. Ciudades como Arequipa o Trujillo necesitan modernizar su infraestructura vial, pero las municipalidades no disponen de los recursos suficientes para esas obras.
Hoy es un día crucial para la democracia, al conmemorarse el 203 aniversario de nuestra independencia. Huánuco esperaba un mejor discurso en temas de educación universitaria, hospitales en las provincias, infraestructura e irrigación para las regiones.
Dentro de esta serie de anuncios sobre las políticas de gobierno y promesas, se observa mucha debilidad en las estrategias macroeconómicas del plan de Boluarte. Nuestro país se encuentra en una recesión económica, con un nivel de inflación que no se ha estabilizado en los últimos meses, frente al incremento de los precios de los productos básicos de la canasta familiar. A esto se suma que el costo de vida, después de la pandemia, se ha elevado a niveles que el peruano de las regiones aún intenta sobrellevar en esta agreste economía.
Es urgente impulsar políticas de gobierno que fomenten el crecimiento económico, con líneas de acción claras en sectores como infraestructura, transporte y agricultura. Es fundamental la educación y la innovación, así como tener bien fundamentadas las actuaciones en materia de salud y seguridad ciudadana. En este mensaje presidencial solo se han escuchado promesas con políticas microeconómicas. No hay un horizonte claro sobre la lucha frontal contra la criminalidad ni sobre cómo enfrentar la corrupción en los sectores policial y judicial, que impide una correcta actuación de los organismos de control.
Recordamos el discurso presidencial de 2023, que fue una lluvia de ofertas. Haciendo un análisis de lo prometido, solo se ha cumplido aproximadamente el 25% de estas promesas. Dentro de ellas, lamento que mi provincia de Marañón, en la región Huánuco, solo haya sido mencionada en la conservación y mejoramiento de la vía PE 12-A, carretera de Pomabamba - Sihuas - Huacrachuco - San Pedro de Chonta - Uchiza. Una importante vía que une a cuatro regiones del Perú y nos conecta desde el norte con Brasil. Sería una vía crucial para la comunicación con Chancay, ya que se inicia desde Chimbote.
Después de varias conversaciones con el ministro de Transportes y el premier, se indicó, con conocimiento de la mandataria, que en esta vía nos hace falta un asfaltado definitivo para mejorar el movimiento económico y la comunicación entre las regiones de Áncash, Huánuco, San Martín y La Libertad. Esperamos que en 2025 se cumpla con lo anunciado sobre algunas vías para la región Huánuco, como se mencionó en los tramos de la nueva carretera central Ambo - Oyón.
Huánuco, como muchas otras regiones, necesita ser recordado y atendido. Las promesas no son suficientes, se requieren acciones concretas y resultados visibles para mejorar la calidad de vida de todos los peruanos.
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