Los cajeros del Banco de la Nación implicados en el millonario robo a los programas sociales no solo habrían sustraido dinero de las cuentas de los beneficiarios con vida, sino también de los fallecidos.
Un informe periodístico del programa de TV “Cuarto Poder” reveló que también cobraron el subsidio de aquellas personas en extrema pobreza a quienes la muerte los alcanzó sin que pudieran beneficiarse de la asistencia económica del Programa Juntos y Pensión 65.
Los implicados volverían a ser María Teresa Ortega Carranza, cajera del Banco de la Nación, que junto a sus ex compañeros Enma Quiroz Medina y Víctor Raúl Ríos Díaz, se habrían coludido para desfalcar sistemáticamente a los programas sociales del Gobierno aprovechando la falta de control y seguridad del mencionado banco para desfalcar.
María Ortega es sindicada por las investigaciones de la propia entidad como la que habría realizado el mayor número de retiros de las cuentas de beneficiarios muertos.
Es así como habría desaparecido el dinero que el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) depositó en la cuenta de María Rosa Cholán Quito, quien murió hace tres años.
“Es una gran pena, una sinvergüencería de las personas que están haciendo esas cosas. Realmente, ¿qué vamos a hacer? Hay de todo en esta vida […]. Debemos descubrir a estas lacras del Estado, porque son del Estado”, señaló Gaspar Cusquisiban, yerno de víctima.
Otro es el caso de Nevelito Mendoza Terrones, quien era usuario del programa Juntos y falleció el 12 de enero del 2011, por lo que resulta ilógico que cinco meses después de su muerte, inexplicablemente, haya cobrado su subsidio estatal.
El Banco de la Nación aún no tiene establecida la cantidad de dinero que le fue robado a fallecidos, ex usuarios de Programa Juntos y Pensión 65.
Según fuentes de dicho ente, por ahora la institución se ha centrado en activar el seguro bancario para devolverles, a los usuarios vivos, el dinero que les fue robado de sus cuentas. Cabe resaltar que el reembolso se efectúa ocho meses después de detectado el desfalco.
Responden
Para Pietro Malfitano, gerente general encargado del Banco de la Nación, “lo que ha pasado es muy sencillo, el fraude es un riesgo presente en la actividad bancaria. Esta es una actividad en la que el riesgo es tal que se pone el control pero queda un margen, un riesgo residual que cubrimos con una aseguradora”.
“¿Para el Ministerio de Desarrollo el banco los ha traicionado? Nosotros hemos hecho nuestra parte prudente. El banco ha cumplido a cabalidad. Me parece que sus controles son los normales para el resto de pago, en general son vulnerables en la ventanilla”, añadió.
Asimismo, agregó que de acuerdo a los compromisos vigentes, Midis debe regularizar los padrones y las personas vivas que figuran en los programas sociales, por lo que allí debería haberse filtrado la información.
Por su parte, la ministra de Desarrollo e Inclusión Social, Paola Bustamante, apuntó que el programa Pensión 65 no ha efectuado pagos a beneficiarios fallecidos.
“No es verdad: el programa desarrolla adecuados mecanismos de control y se asegura que se revierta al Tesoro los montos depositados con posterioridad al fallecimiento”, manifestó la representante del Poder Ejecutivo.
Por último, agregó que al residir los afiliados a este programa social en zonas rurales alejadas, en la Amazonía o en localidades de frontera, en muchas ocasiones la información sobre el fallecimiento se registra 24 horas o hasta un año después de ocurrido, detalló.
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Cajero de Banco de la Nación robó a víctimas del terrorismo ►http://t.co/Dd0ogdE5CE pic.twitter.com/3PRj1nIkAq
— Política El Comercio (@Politica_ECpe) junio 1, 2015