El expresidente Alejandro Toledo, sobre quien pesa un proceso de extradición de Estados Unidos al Perú, intenta renovar su pasaporte en el Consulado de San Francisco. El pedido lo realizó el 17 de junio.
En un oficio del 23 de junio de la Cancillería a la Unidad de Cooperación Judicial, se indica que se procederá con la emisión del pasaporte dado que no existe impedimento legal, ni judicial para tramitarlo y además porque es usado como documento de identificación en el exterior.
Tras conocer esa información, la Segunda Fiscalía Superior de Lavado de Activos, a cargo de Rafael Vela, emitió diversas alertas y pedidos.
En uno de los oficios, enviado el enviado el 23 de junio a la Novena Sala Penal Liquidadora de la Corte Superior de Justicia de Lima, el fiscal Vela solicita que evalúe las acciones legales que considere viable teniendo en cuenta que “la solicitud de un nuevo pasaporte podría implicar un “probable desplazamiento fuera del territorio de los Estados Unidos”.
Otro de los oficios, fechado este lunes 27 de junio, está dirigido al fiscal Rafael Vela Barba, por la fiscal superior Rocío Gala Gálvez, jefa de la Unidad de Cooperación Judicial Internacional y Extradiciones.
En dicho documento, se da cuenta que ya se ha cursado oficios a la Oficina de Cooperación Judicial del Ministerio de Relaciones Exteriores, comunicando que el 24 de junio la embajada peruana informó que se puso en conocimiento del Departamento de Justicia de ese país sobre la intención de Toledo de renovar su pasaporte.