Con las restricciones que implica estar en prisión, en el 2019 los dos máximos líderes del fujimorismo, Alberto y Keiko Fujimori, recurrieron a una estrategia de comunicación similar: la publicación de cartas –de puño y letra- en sus redes sociales.
A lo largo del año y en distintos momentos, tanto los Fujimori como sus familiares directos hicieron públicas cartas en las que sentaron posturas sobre temas tanto personales como políticos. La última fue publicada por el expresidente este 31 de diciembre, último día del año. En esta, Alberto Fujimori instó a su hija a poner su familia por delante y condenó lo que consideró un “ensañamiento” de los fiscales en su contra.
“Keiko: ninguna acción abusiva ni arbitraria deben desenfocarte de tu acertada decisión de priorizar a tu familia. Sé que no es nada fácil, pero conozco tu fe y tu fortaleza con la que sigues enfrentando todo hace 20 años”, se lee en el escrito.
Aquí un recuento de las misivas que del fujimorismo y su entorno familiar que se difundieron en el 2019.
—Cumpleaños en prisión—
El 25 de mayo, Keiko Fujimori cumplió 44 años. Ella permanecía en prisión preventiva desde el 31 de octubre del 2018, en el marco de la investigación que se le sigue por los aportes de campaña en el caso Odebrecht.
A través de una publicación en sus redes sociales, la excandidata presidencial se comunicó desde el penal.
“Hoy quiero decirles a todos que no he perdido la esperanza. Me habrán privado de mi libertad injustamente, con mentiras y sin reconocer que ni siquiera fui gobierno, pero jamás me privarán de mi derecho a creer que la justicia vencerá a la arbitrariedad”, escribió.
Ese mismo día, su padre, Alberto Fujimori, le envió una carta que fue publicada en las redes de la misma Keiko.
"Keiko, sé que el 25 será el cumpleaños más triste de tu vida y que nadie podrá borrar el dolor de estar separada injustamente de tu esposo y de tus hijas. Por eso te pido que no pierdas nunca la esperanza de que esto va a terminar y que pronto podrás volver a casa para abrazarlos más fuerte que nunca", se lee en la misiva.
En esta, además, Fujimori sostuvo ser el responsable del destino de su hija. "No hay medicina que calme el gran dolor de saber que fue mi ingreso a la política el que ha generado todo esto”, escribió el expresidente.
—Cartas en tiempos de incertidumbre—
Las cartas a puño y letra volvieron a publicarse 5 meses después, en medio de un futuro electoral incierto para Fuerza Popular (FP) y una crisis de legitimidad ocasionada por el descrédito de la bancada fujimorista en el Congreso y el encarcelamiento de Keiko.
En octubre, según El Comercio-Ipsos, la hija de Alberto Fujimori tenía un 8% de aprobación.
Con miras a las elecciones congresales del 2020, las fichas del tablero dentro del fujimorismo empezaban a moverse. Mientras tanto, misivas desde los penales con menciones a la “unidad”, “nuevos comienzos” y “renovación” empezaban a circular.
La primera provino de Alberto Fujimori. A poco menos de un mes de disuelto el Congreso, el 27 de octubre, el patriarca de los Fujimori publicó una carta escrita a mano en la que pedía por la reconciliación de sus hijos.
“Lamento profundamente que algunas personas interesadas han venido desuniendo a mi familia, perjudicando con esto hasta el movimiento que yo mismo fundé […]. “Les pido a todos los que me aprecian para que me apoyen en el gran reto de unir a mis hijos”, escribió el expresidente.
Dos días más tarde, el 29 de octubre, Keiko Fujimori respondió a su padre de la misma manera: mediante una carta pública. “No es la primera, ni será la última vez que algunos intenten separarnos, pero hoy más que nunca estoy convencida que estar unidos es lo más importante (…) ha llegado el momento de volver a empezar”, escribió.
La respuesta del expresidente no tardó en llegar.
“En la familia Fujimori nunca es tarde para volver a empezar... eso sí, es indispensable renovar en todo sentido”, escribió.
La reconciliación de Keiko y Kenji Fujimori –cuya pugna llegó a su pico con la renuncia del bloque ‘kenjista’ a la bancada de FP- no solo era una cuestión íntima y familiar. Para el fujimorismo, el retorno de Kenji al partido representaba una oportunidad de, ante el descrédito de Fuerza Popular, atraer el voto duro fujimorista que, según el politólogo Carlos Meléndez, bordea el 10%.
En aquel entonces, fuentes de El Comercio cercanas al menor de los Fujimori confirmaron que miembros del partido –aunque no la misma Keiko- habían intentado convencerlo de volver a integrar sus filas. Incluso de manera pública, algunos fujimoristas parecían haber dejado atrás la implacabilidad con la que desplazaron a los ‘avengers’. Karina Beteta, por ejemplo, sostuvo por esos días en Canal N que ella “no veta a nadie” en referencia a una eventual candidatura de Kenji por FP.
Sin embargo, el retorno de Kenji era poco probable. Sobre todo luego de que, a través de una publicación en su página web, criticara duramente el performance congresal de la bancada naranja. “Renuncié a Fuerza Popular en marzo del 2018 precisamente por las razones que expongo en esta carta, y no volveré”, había escrito.
—Escriben los familiares—
Quien también escribió un mensaje de puño y letra que fue publicado en redes sociales fue Mark Vitto Villanella, esposo de Keiko Fujimori.
En noviembre, Giulliana Loza, abogada de Fujimori Higuchi, publicó en su cuenta de Twitter una carta escrita por el estadounidense. En esta, Villanella anunció el inicio de su huelga de hambre.
Unos días más tarde, a poco de que el Tribunal Constitucional (TC) decida sobre el hábeas corpus que buscaba la liberación de Keiko, su hija mayor escribió también una misiva, dirigida a los vocales de dicha institución.