Para el candidato a la alcaldía de Lima por el Apra, Enrique Cornejo, su principal problema para hacer despegar su campaña no tiene relación con sus propuestas y su perfil, sino el partido al que representa.
“Tengo la seguridad de que en las próximas semanas muchos limeños cambiarán su voto hacia mi opción. El único defecto que me ponen no es por no tener ideas, no es por no ser capaz, no es por mi hoja de vida, que no tiene manchas, él único defecto que tengo a los ojos de la ciudadanía es ser aprista”, dijo.
En diálogo con El Comercio, el ex ministro de Transportes y Comunicación dijo que tiene que ‘desapristizar’ su campaña, demostrándole a elector que una eventual victoria suya no significará el copamiento del aprismo en la Municipalidad de Lima.
“Esto último [‘desapristizarme’] es un poco más difícil, pero ‘desapristizar’ la campaña sí. Les voy a explicar a los electores que el voto por Cornejo no es un voto sectario, no es un voto para que Cornejo llegue al municipio y lo llene de apristas. Esa no es mi forma de trabajar. Por ejemplo, cuando he trabajado en el Banco de la Nación y en los ministerios de Transportes y Comunicaciones y Vivienda, Construcción y Saneamiento los ejecutivos principales eran técnicos independientes”, refirió.
Cornejo dijo que demostrará con hechos y no solo con palabras que cuando tuvo la oportunidad de dirigir una entidad del Estado no la llenó de ‘compañeros’.
“Algunos apristas me han acompañado, pero por meritocracia y no por ser del partido”, expresó.
“CASTAÑEDA Y HERESI ME TEMEN”
Respecto al ascenso del candidato de Perú Patria Segura (PPS), Salvador Heresi, en las encuestas, el postulante del Apra indicó que este hecho le afectó al alcalde saliente de San Miguel.
“He escuchado al señor Heresi plantear un debate de solo tres candidatos: Castañeda, Villarán y él. Que rápido se contagia la soberbia en esta campaña. Hasta antes de esta encuesta [de CPI] el soberbio era Castañeda que no quería debatir, que no quería participar, no quería que lo entrevisten. Ahora vemos que hay un segundo soberbio”, manifestó.
El ex ministro consideró que tanto Castañeda como Heresi tienen miedo de debatir con él, porque sus propuestas “son técnicas y concretas”.
Para concluir, indicó que hay una tendencia a la baja de la postulación de Castañeda y que la intención de voto a la alcaldesa Susana Villarán (Diálogo Vecinal) se ha estancado. Por ello, se mostró seguro de revertir las cifras de los últimos sondeos, que solamente le dan entre 3% y 3.5%.