Oposicin, radicalidad, provocacin. Esos son valores para Marisa Glave, pero cuesta trabajo que los admita. Primero, ella misma los define para estar segura de los cargos que le hago. Pero no son cargos! Son cumplidos. Ms all de las discrepancias, a sus argumentos les suelo encontrar un brillo seductor.
Antes de hablar de ella, hablamos de Yeni Vilcatoma, quien est en el ojo de la tormenta. Marisa le tiene buena onda, pero me aclara que la especulacin sobre su pase al Frente Amplio no tiene asidero. Pobre Yeni. Y hablamos de su Mema, su querida abuela Elba Testino, que acaba de padecer una ciruga. Por eso, la entrevista tiene lugar en un caf, cerca del hospital.
Sin rodeos, qu le espera al Frente Amplio? Me gustara que en el FA todos nos sintiramos sus activistas y a la vez activistas de nuestras propias organizaciones. O sea, nada de convertir el FA en partido, pero s que este acoja nuevos partidos, adems de Tierra y Libertad. Y Vernika? Eso s, los dirigentes del frente debieran ser activistas del frente y no de sus organizaciones. En el esquema ideal de Marisa, Vernika es la principal de un grupo de lderes asociados al FA antes que a sus propios partidos, si los tuvieran. Despus de todo, la teora de los liderazgos mltiples no es exclusiva de Marco Arana. Sobre sus diferencias con Marco y su futuro en TyL, ah s, Marisa se pone esquiva.
Liberal no, libertaria! El sambenito de una sola izquierda la tiene harta. El fantasma de la Izquierda Unida persigue a la izquierda, no se trata de la unidad por la unidad, sino de saber que se tienen principios comunes. O sea, la identidad vale ms que la unidad. Cul es la tuya, siempre fuiste de izquierda? Soy de izquierda, eso queda claro. Pero fui llegando a ella. Empec en una lucha por la democracia, en las marchas contra Fujimori. Y hasta ahora, no ceja en la grita antifujimorista, aunque admite que ha encontrado algunos buenos interlocutores en la nueva hornada de Fuerza Popular.
La radicalidad de Marisa es precoz. Fue dirigente escolar en el Sagrados Corazones Recoleta y lleg a presidir la Fepuc (Federacin de Estudiantes de la Universidad Catlica) mientras estudiaba Sociologa. Es hija de la sociloga Mara Isabel Remy y del historiador Luis Miguel Glave; ambos ligados a la PUCP, al IEP y a otros santuarios del pensamiento caviar. Menciono el trmino sin complejos, porque quiero preguntarle algo provocador: Por qu no reivindicar la etiqueta de caviar como algunos reivindican la de cholo o la de maricn? Depende de cmo lo veas. Tengo amigas que me dicen: Hay que ser valiente para decirse maricn, que es la reivindicacin de la valenta de la identidad. Lo de cholo tiene muchas lecturas tambin. Sobre lo de caviar, lo que me molesta es que mira a alguien como si no estuviera conectado a la realidad. Si tiene que ver con la defensa de derechos, en buena hora.
Completemos el DNI ideolgico: Soy de izquierda, feminista, ecologista. Liberal?, pregunto, pensando en derechos humanos. Libertaria, responde, evitando que la asocie con quienes creen que el tamao del Estado y el peso de la regulacin se supeditan al crecimiento econmico.
Los ppkausas son menos de derecha de lo que pensabas? Creo que son una organizacin de derecha y creo que este va a ser un gobierno de derecha. Me alegro que hayan llegado a algunos pactos mnimos en la campaa. Por ejemplo, el presidente dice que ha firmado que no va a privatizar Sedapal, pero es eso lo que quera hacer. En el pedido de delegacin de facultades hay una oda a las APP [asociaciones pblico-privadas] y a las obras por impuestos (OxI). El problema es que tenemos que fortalecer el Estado pensando en la gente, y las APP y las OxI son una fuga del Estado hacia el sector privado. Sigue la teora del Estado mnimo.
A veces, concilio Cuando le digo que es radical, Marisa replica: No siempre soy radical en el sentido de extremista, sino en el sentido de ir a la raz de los temas. En la raz, tal como ella la extrae y la saborea, estn el medio ambiente contaminado por el extractivismo, la sociedad dividida en clases irreconciliables, los pueblos indgenas con prerrogativas milenarias. Qu tan real o mistificado sea cada tema es una discusin inacabable, para la que Marisa se ha preparado en el partido, en la ONG, en la Municipalidad de Lima, donde fue dos veces regidora, y ahora tiene que ser especialmente persuasiva en la Comisin de Vivienda que preside.
Por qu no usan un lenguaje parecido a aquel con el que la gente procesa su malestar? Hay un esfuerzo en el FA y en la gente de mi generacin por traducir no en trminos tcnicos difciles, sino en trminos de su bolsillo. Suena mejor. La dejo terminar. Hay diferencias sociales marcadas en el pas y tenemos que apostar por que las grandes mayoras tengan las mejores condiciones posibles, eso supone discutir su condicin como consumidor.
Qu es lo no negociable en el Congreso? Derechos. O sea, punto ms punto menos de IGV no le importan tanto como los derechos laborales. No apoyarn medidas que flexibilicen esos derechos? De ninguna manera. Flexibilidad tributaria a las pequeas empresas? Eso s. Luego, me dice que en el rango de las medianas empresas, teme que el gobierno meta de contrabando a algunas grandes. Marisa no perdona.
Es implacable con grandes empresarios, fujimoristas y apristas. Si es posible grita esterilizaciones o narcoindultos para fastidiar a los dos ltimos. Ser conciliadora no es evitar hablar de lo que no quieren or, me dice, provocadora, aunque no acepta definirse como tal. Claro que lo es. Sonre y apunta, para rematar su DNI: Algunas veces soy conciliadora. Cuntame de alguna vez que dijiste: Caray, qu conciliadora estoy, no parezco yo, digo, como para que siga sonriendo. A veces genero consensos. Alguna vez me han convencido, por lo tanto siempre me acerco a intentar convencer.
MS EN POLTICA