El presidente de la República, Martín Vizcarra, declaró ayer que el gobierno se encuentra en contra de la reforma aprobada sobre bicameralidad. Ello, principalmente, porque no se incluyó la paridad de género en las listas de postulantes al Parlamento y porque se habría desvirtuado la figura de la cuestión de confianza.
Coincido personalmente con ambos cuestionamientos. Como este Diario publicó el 5 de octubre (ver “Reformas con cambios”), se realizaron varios cambios de fondo a las propuestas originales. Sin embargo, llama la atención la contradicción en las declaraciones del mandatario al respecto.
Como se recuerda, el presidente brindó una entrevista a TV Perú el mismo día en que el pleno dio su voto favorable a la bicameralidad.
En aquella ocasión, el periodista le preguntó: “¿Cómo interpreta esta decisión del Congreso de legislar sobre la cuestión de confianza, limitando la capacidad del Ejecutivo, ya no permitiendo que los ministros lo puedan hacer, no permitir sobre propuestas legislativas, limitándola a la PCM? Pareciera que están legislando para limitar a Martín Vizcarra. ¿Cómo queda eso?”.
A lo que el presidente respondió: “Nosotros vamos al aspecto de fondo de las propuestas. Entonces, ¿ha habido cambios? Sí ha habido cambios. ¿Cambian el concepto de fondo de las propuestas? Creemos que no, por eso las aceptamos, por eso saludamos”.
Ayer, en entrevista en RPP, al ser confrontado sobre esta discrepancia, Vizcarra declaró que, por la premura de la aprobación, recién habían tenido tiempo para analizar los cambios. Cuesta creer que el presidente haya decidido dar una entrevista y brindar su respaldo al trabajo del Legislativo sin estar cabalmente informado sobre el tema. Sobre todo porque en sus declaraciones previas a TV Perú había señalado que “estas reformas [...] han sido un trabajo permanente de gente del equipo del Gobierno que ha estado viendo todo este debate, todo este análisis. Hemos estado a través del Ministerio de Justicia, de la Presidencia del Consejo de Ministros”.
Llama la atención también que caiga en contradicciones respecto a la participación del primer ministro César Villanueva. En la entrevista de ayer, Vizcarra afirmó que Villanueva había ido al pleno a expresar sus cuestionamientos a los cambios sobre la cuestión de confianza. Si bien el primer ministro dejó constancia por Twitter, cuando intervino en el pleno lo hizo con un mensaje conciliador: “El tema relacionado a la bicameralidad, han hecho el debate amplio, y el tema, finalmente, de la no reelección. Esa generosidad de ustedes, colegas, tiene que transmitirse en un hecho y en un voto concreto [sic]”. Luego, procedió a votar a favor del proyecto, junto con el ministro de Justicia, Vicente Zeballos, y toda la bancada oficialista.
Si el Ejecutivo se arrepintió de brindar su respaldo a una de las reformas porque considera que no se ajusta a sus expectativas, está en todo su derecho de retractarse, pero debería ser transparente al respecto. Si, efectivamente, al presidente no le advirtieron de la dimensión de las variaciones incorporadas a los proyectos de ley hasta luego de la entrevista en TV Perú, toca conseguirle nuevos asesores a Palacio, urgente.