Un día antes de que el pleno inicie el debate del informe de los 'narcoindultos', la defensa de Alan García hizo público un comunicado que reitera que no cometió delito ni violó la Constitución cuando otorgó las gracias presidenciales durante su segundo mandato.
“Conceder gracias es una atribución presidencial [artículo 118, inciso 21 de la Constitución] y solo está prohibida para los casos de secuestro, violación y terrorismo, a los que no se aplicó”, indica el documento en tácita referencia a la indagación de la megacomisión.
“Ninguna prueba o documento vincula a Alan García con irregularidades o recepción de dinero”, agrega.
También se señala que, “en absoluto desacato y desafío a la sentencia [que declaró nulo todo lo referido a García], que tiene autoridad de 'cosa juzgada', la mayoría gobiernista y sus aliados pretenden debatir y votar esos informes nulos, afectan gravemente los fundamentos del Estado de derecho con el exclusivo propósito de dañar e inhabilitar electoralmente a Alan García”.
La defensa de García recalcó que el ex mandatario responderá por sus actos en la medida “que se respete el debido proceso y no se utilice la mayoría parlamentaria como un puñal jurídico para castigar su ‘crimen’ de impedir la ‘reelección conyugal’”.