— ¿Por qué Avanza País?
Desde noviembre del 2021 yo tengo conversaciones con Aldo Borrero. Estoy imposibilitado de seguir con mi línea política, que fue el fujimorismo, porque este partido ha tenido una mutación, en mi opinión, en defensa de Dina Boluarte que yo no comparto. Consideré que tenía que ver otras opciones. Es cierto que he apoyado a Rafael López Aliaga. Es amigo mío y tiene un lineamiento en algunas cosas muy parecidas a las que yo pienso, pero su compromiso con la municipalidad es de tiempo completo y eso lo lleva a limitarse.
— ¿El fujimorismo no lo sedujo con el retorno de Alberto?
Para nada. Una persona cinco años mayor que el señor Biden no dará la estabilidad que uno está pidiendo.
— ¿Alberto Fujimori y Hernando de Soto son réplicas de Biden?
No conozco la salud de De Soto; es menor que Fujimori que sí es una persona que tiene una salud muy comprometida. Si estuviéramos 10 años atrás podría ser una opción.
— En serio, ¿Fujimori está habilitado para ser candidato? Me refiero a su renuncia a la presidencia, su candidatura al Senado japonés, los delitos que cometió…
Yo no comprendo la propuesta, salvo que estemos hablando de un mecanismo distractivo o convocando para ilusionar como estrategia marketera. Si el fujimorismo ha dicho al país desde el año 2011 que hay recambio, renovación, sucesión generacional y los errores del pasado han cambiado, ¿qué sentido tiene volver a lo anterior?
— ¿Se han dado cuenta de que Keiko no ganará?
Entonces, estamos en el cálculo político y no en los principios. La candidatura de Alberto Fujimori, por donde se la vea, es muy complicada. Nos retrotrae al año 2000 y pensábamos que 25 años después ya habíamos superado esos problemas. Alberto Fujimori es una figura de la historia del Perú, para bien o para mal. Permanecer en el presente es un error.
— Usted es crítico de la derecha. Ha dicho que está dividida, presentando tres ofertas distintas...
Viendo a dos años todo parece muy oscuro, pero el Perú es un país que no deja de sorprender. Siempre pueden mejorar las cosas porque este es un país de gente optimista, trabajadora, un país que se despierta a las cinco de la mañana para buscarse la vida. La izquierda es mediocre, es verdad, cada día más mediocre; y la derecha, que probablemente sea menos mediocre porque hay gente que ha tenido éxito en su vida profesional, es muy egoísta y quiere que todo se haga según su medida.
— ¿Y el centro?
No existe, el centro es una ficción. Avanza País quiere ocupar el espacio de los independientes. Más allá de la división de izquierda y derecha existen otras estructuras de análisis en el Perú: formales e informales. Hoy, la ley electoral prohíbe a un independiente ser candidato a la presidencia de la República porque tengo que inscribirme en un partido para poder estar en una plancha presidencial.
— ¿No se trata de impedir que aterrizados como Pedro Castillo lleguen a gobernar?
Castillo era un dirigente del Sutep, era un líder sindical.
— Un líder mediocre...
Pero miremos. Después de la candidatura presidencial, cuántos pueden candidatear al Congreso de la República en las próximas elecciones. Los inscritos en los partidos políticos, en los 40 partidos políticos que están inscritos, ¿cuántos peruanos son? El Perú no puede construirse solamente de aquellos que formalizan una inscripción.
—Hay una cuota de invitados.
De 20% ¿Creen que esas personas inscritas en los partidos son mejores que la gran cantidad de personas que no se inscriben por no perder su tranquilidad?
— No necesariamente...
Entonces, estamos llevados por una formalidad creada por una ley electoral hecha por caviares, favorecedora de las ONG y perjudicadora de los partidos, que no fomenta alianzas sino que las castiga. Yo estoy en contra de esta reforma que no ayuda a la participación.
— ¿Usted va a la Cámara de Diputados... al Senado?
No lo sé. Falta un año y en el Perú es un siglo. Veré a qué postulo. La cámara política es la de Diputados, es donde está el debate y todo lo demás. El Senado es una cámara jubilatoria, ¿no? Ni siquiera hay gran cantidad de debate.
— ¿La plancha presidencial le atrae?
Eso depende del candidato.
— ¿Quién es el candidato de Avanza País? ¿Phillip Butters? ¿O es una estrategia marketera?
Hay la posibilidad en esta organización de que haya varios presidenciales, como Adriana Tudela, como el general Williams.
— ¿Usted también?
Yo también. ¿Por qué me voy a discriminar?
— ¿Le gustaría ser presidente?
Es el mayor honor que tiene un peruano. Ahora yo no pongo una candidatura mía antes que nada. Hay que buscar la unidad de las fuerzas que estamos en el espectro, desde el centro hasta la derecha. Por eso la candidatura de Avanza País no puede ser óbice para encontrar unidad.
— ¿Usted apoyará la candidatura de Butters?
Yo sí lo apoyaría. Philip no tiene objeciones de gestión o gobierno. A Phillip Butters se le toma o se le deja; el problema en el Perú es que no sabemos a qué atenernos con los políticos. Nos dicen una cosa y hacen otra. Butters tiene posiciones políticas muy claras y la gente lo sabe. Eso para mí es una tranquilidad. Veremos si al final toma la decisión de postular, que es una decisión que creo meditará mucho porque es cambiar la naturaleza de toda su vida. Yo voto y apoyo las alianzas, pero la política del Perú es la política de los egos. Lo que hunde a la política del Perú son los egos y egoísmos.
— ¿Sigue pensando que vivimos en una república caviar?
Sigo pensando lo mismo.
— Los caviares y la izquierda dicen que Dina Boluarte es un gobierno fujimorista.
Esa es una extraordinaria propaganda. Han logrado etiquetar al gobierno de esa manera, pues habiendo perdido el poder, lo que quieren es la oposición. Lamentablemente, el silencio del ‘fujidinismo’ que es casi cómplice y el acuñismo paterno suman a que esa etiqueta se haga creíble. Es muy dañina para los sectores de la derecha popular porque hay la percepción generada por una propaganda y no desmentida o no aclarada, de que este gobierno ha sido un gobierno de derecha.
— ¿César Acuña y Keiko Fujimori han cometido un grave error al no deslindar de Dina?
Con el gobierno de Dina no se puede ir ni a la esquina. Este no es un gobierno de derecha. No me representa, pero lamentablemente es apoyado por derechistas que le hacen un pésimo favor a la derecha, están haciendo que la propaganda de la izquierda parezca revalidada. El gobierno de Boluarte no es ideológico.
—¿Es un gobierno de supervivencia?
De supervivencia, donde están metidos muchos de los que vienen del gobierno de Castillo, otros que apoyaron al gobierno de Castillo pero que no estaban en la primera línea. Lo que ha agravado la situación son los derechistas amables.
— Varios políticos aclaran que se debe generar estabilidad y que peor es una elección adelantada.
Esa es la palabra clave para interpretar toda la situación política: Estabilidad. ¿La señora Dina es garantía de estabilidad? Yo creo que no. Es una incertidumbre absoluta. Es la inestabilidad permanente, total. Pedro Castillo era el caos, pero ella sigue siendo inestabilidad. Ella no entendió la naturaleza de su gobierno, que era salir ordenadamente y dejar un gobierno nuevo y estable. Se subió una legión de oportunistas y la convencieron de que podía o debía durar. Bueno, esta duración ha sido inestable y hoy vivimos en la incertidumbre. No sabemos qué va a pasar. Y, curiosamente, ahora nos encontramos que los garantes de la estabilidad, entre comillas, quieren proponerle al Perú un candidato de 85 años. ¿Qué estabilidad es esa? Castillo, que es una anomalía histórica, ¿es la medida de lo que merecemos los peruanos? Debimos salir en el 2023 de Boluarte, todo el mundo le hubiera agradecido haber conservado los platos, la vajilla y todo, para entregarlo a un gobierno de derecha o de izquierda, el que el país elija. Pero primó el miedo a las elecciones.
— “Si se va Dina, ¿quién sube? Alguien peor que Castillo”, es lo que argumentan.
Bueno, eso no es ser demócrata. Si le tienes miedo a las elecciones, estás en el régimen equivocado. Yo no temo. Si las elecciones dan un resultado que no me gusta o hay un fraude que cambia el sentido de las elecciones, salgo a combatir.
— ¿No le teme a Antauro?
No. Yo no tengo miedo a ir a las elecciones con nadie. Que no me guste o que considere que no es oportuno es otra cosa. Las elecciones siempre son la solución para un problema. A veces agravan las cosas, entonces habrá que ir a otra elección. Hoy el apoyo a Dina Boluarte es producto de mucha cobardía política. El país está en la incertidumbre total y estamos a la mitad del 2024.
— ¿Ve el futuro con desánimo?
Y con mucho peligro de que los despropósitos del gobierno de Boluarte tengan un fin abrupto. La contraloría ha dicho que la señora tiene desbalance patrimonial. Le ha dicho: “Te has robado plata”. ¿Cómo puede tener desbalance patrimonial quien no tiene otro ingreso que su sueldo como presidenta?
— Ya se admitió la acusación constitucional por el Caso Rolex. Amnistía Internacional dice que es la autora mediata en el caso de las muertes por las asonadas.
Si Boluarte se hubiera ido antes, hoy día tendría la gratitud nacional. Lamentablemente, al tratar de permanecer, ella está desgastando su figura. Ella va a tener un proceso muy similar al de Yáñez en Bolivia. Se quedará entre el odio de la izquierda y el desinterés de la derecha que no la necesita más.
— ¿Dina terminará presa?
No podría decir que no.
“Se está cocinando la continuidad del poder caviar”
— Piero Corvetto ha sido ratificado en la ONPE, Velarde también en el Reniec. Solo falta que Salas Arenas se quede en el JNE.
Veo con absoluto peligro las próximas elecciones. ¿En el Perú no hay otras personas que pudieran ocupar esos cargos? ¿Por qué no quieren dejar los cargos? ¿Por plata o porque tienen algo que encubrir? Una parte del Perú acusó a Corvetto de que había un fraude o de que su comportamiento no fue transparente. El señor Salas Arena impidió la inscripción de dos partidos históricos. ¿Por qué insistir en que se queden?
— ¿Qué piensa usted?
Que buscan encubrir lo que pasó en el 2021. Ellos son prisioneros de esos cargos, tienen que quedarse ahí para que nadie venga a demostrar cuando revisen y se haga una auditoría al fraude del 2021. Es clarísimo. Aquí se está cocinando la continuidad del poder caviar. Castillo y Boluarte han sido un bache en este eterno poder. Boluarte, desde el Ejecutivo y el Congreso de la República que la sostiene, que es el lugar donde los caviares han perdido el poder, están alejados de esa fuerza que es la que ha manejado el Perú los últimos 20 años. El Poder Judicial se ha convertido en el bastión de la República caviar para defender los intereses de esos grupos ideológicos. Además, la estructura electoral de la Constitución, diseñada en el gobierno de Fujimori para controlar las elecciones a través del Poder Judicial, establece que quienes forman el poder electoral o el sistema electoral dependen del Poder Judicial. Los jurados especiales son conformados por miembros del Poder Judicial y al final gana quien cuenta los votos.
— Usted fue abogado de Odebrecht. ¿Se arrepiente de haber defendido a esa empresa corrupta?
Yo no he defendido a Odebrecht en el sentido que mis opositores izquierdistas y financiados por la señora Villarán dicen. A mí me contrataron como consultor. No he ido a ningún tribunal a defender a los señores de Odebrecht. Fui la primera persona que hizo que Barata fuera a presentarse a la comisión Pari. A mí se me convoca para la colaboración que se estableció con el fiscal Hamilton, que de pronto desapareció y mutó en otra colaboración, en la cual no tengo nada que ver.
— ¿Qué piensa de ese acuerdo?
Es un canto a la impunidad. A la luz de los hechos, definitivamente los fiscales no han cumplido su deber. En el Perú no se busca la justicia, sino proteger a mis amigos y perjudicar a mis enemigos. Esa es la realidad del Perú.
— Y mire todo lo que ha contado Jaime Villanueva...
Villanueva ha desnudado la realidad de las miserias de los organismos judiciales o fiscales y su compromiso con un sector ideológico y político. Ahora tenemos que escuchar la ridiculez, payasada o vergüenza que los fiscales, sus examigos, le digan operador fujimorista. Es realmente ridículo.