Es una de las bandas más desquiciadas del país. Su centro de operaciones estaba en el norte, en Trujillo. Los Pulpos, como se hacen llamar, secuestraban a personas y las torturaban cortándoles partes de sus cuerpos (orejas y dedos) para que sus familiares accedan a pagar el dinero que exigían como rescate. Si el dinero no se les daba, mataban al secuestrado sin compasión.
Su más reciente secuestro fue el de Nilda Arrascue Espinoza, una empresaria de 43 años que había logrado el éxito con “Tienda Tía”, su negocio de venta de abarrotes al por mayor. El pasado 15 de noviembre, su camioneta fue interceptada por un auto cuando llegaba a su casa, en la urb. Palermo. De ese vehículo bajaron varios delincuentes con chalecos de policías y se la llevaron con paradero desconocido. Todo quedó grabado en un video.
Luego de 12 días de angustia, la madrugada del domingo, veinte policías de la División de Delitos de Alta Complejidad (Diviac) y de la División Antisecuestros llegaron hasta una pequeña casa en el asentamiento humano Ampliación Nuevo Horizonte, en el distrito de Salaverry, a unos 30 minutos del centro de la ciudad.
Uno de los agentes usó una comba para romper la puerta de fierro. Adentro todo era incertidumbre. Estaba oscuro. Solo se escuchaba la voz de los policías gritando: “¡Alto! ¡No se mueven! ¡Policía!”. En una de las habitaciones, encontraron a Nilda Arrascue. Los agentes la abrazaron y aplaudieron emocionados por encontrarla viva. “¡Bien! ¡Bien! ¡Tranquila! Somos la policía”, le decían. Ella lloraba, nerviosa. “Gracias, gracias, gracias”, sollozaba. Al fin iba a ser liberada tras 12 días de cautiverio.
Al intentar sacarla del inmueble, uno de los delincuentes se enfrentó a los agentes, pero recibió un balazo en la cara. Otros tres delincuentes, a cargo de la custodia de la secuestrada, fueron detenidos. Uno de ellos fue clave, porque dio información de otro secuestro que había cometido la peligrosa organización y que seguía sin ser resuelto.
Lo asesinaron y enterraron
Manuel Rodríguez Cruzado, de 73 años, fue otro de los secuestrados de esta temible banda. Pero su historia, a diferencia de la de Nilda, acabó muy mal. Él, padre del exalcalde de la provincia de Julcán John Rodríguez, fue secuestrado el 24 de junio de este año. Sus captores lo sorprendieron en su negocio, un lavadero de carros, ubicado en la urbanización Los Portales, en Trujillo.
Desde entonces, se supo poco sobre su paradero. Los secuestradores exigieron a la familia la suma de S/150 mil y establecieron contacto a través de un abogado vinculado a la banda. A través de él, se hizo entrega de S/120 mil; sin embargo, el anciano no fue liberado.
Los agentes de la policía que trabajaban en el caso se mostraron muy preocupados a partir de agosto, porque se perdió toda la comunicación con la banda. Ya no respondían ni llamaban. Tampoco mandaban pruebas de que el señor seguía con vida. Todos esos temores se confirmaron ayer luego de que uno de los secuestradores de Nilda Arrascue confesara que también participó en el secuestro de Manuel Rodríguez, y que este se encontraba enterrado cerca de la playa trujillana de Las Delicias, en el distrito de Moche.
Hasta ese lugar llegaron los agentes de la PNP. Tras varias horas de excavar en el predio abandonado, encontraron el cadáver de don Manuel Rodríguez. Según se conoció, su cuerpo estaba dentro de un costal, maniatado y con la boca tapada. Lo asesinaron y luego lo sepultaron ahí.
Según el jefe de la III Dirección Territorial Policial, el general PNP Augusto Ríos Tiravanti, la razón por la que la banda habría asesinado a Rodríguez fue porque no se les entregó el dinero completo. El oficial afirma que le pedido fue de S/150 mil y que le familia les entregó S/120 mil a través de un abogado de los delincuentes de apellido Leiva. Sin embargo, ese dinero no les habría llegado completo y, por eso, le quitaron la vida asfixiándolo.
El secuestrador que dio con el paradero confirmó la información que la policía manejaba desde hace meses: detrás de todos estos secuestros –que en total han sido cinco desde el 2021 a la fecha– está la banda de Los Pulpos. A él lo contactó directamente Jhonsson Smit Cruz Torres, el cerebro de la banda. Primero le encargó la custodia de Rodríguez y luego la de Arrascue.
¿Cómo rescataron a Nilda Arrascue?
Apenas fue secuestrada Nilda Arrascue, los agentes de la Policía que seguían los tentáculos a Los Pulpos asignaron un experto en negociación de la PNP para que establezca el contacto con los secuestrados. Estos exigían S/1 millón. La estrategia, en este caso, fue no pagar ninguna suma de dinero a los delincuentes.
Agentes de la Diviac y de la División de Secuestros de Lima que investiga a ‘Los pulpos’ desde que empezaron a secuestrar, lograron capturar el sábado por la noche al delincuente Rodolfo Ventura Asto, apodado ‘chofa’, un sujeto de 36 años que se encargaba de cortar las orejas a los secuestrados. Todo era grabado para presionar a la familia.
Según la División de Secuestros de la PNP él participó recientemente en el asesinato de un cabecilla de la banda rival ‘Los ochenta’. Vistiendo chalecos de policías de la Diviac entraron a una cevichería de Trujillo, fingieron una intervención policial y lo ejecutaron frente a los comensales.
A ‘chofa’ lo encontraron escondido en una casa en Villa María del Triunfo. Acorrolado, no le quedó más opción que revelar dónde se encontraba secuestrada Nilda Arrascue.
La Diviac y la policía antisecuestros, con apoyo de la policía de investigaciones de Trujillo, montó un operativo de forma inmediata. Un total de 20 hombres se alistaron para la incursión que, finalmente, se llevó a cabo en la casa de Salaverry, a las 3 de la mañana. Allí estaba Nilda, custodiada por varios hombres.
Dos de los secuestradores fueron identificados como Frank Zapata Sabogal (27) y Christian Montero Sandoval (28). A ellos se les encontró una pistola Browning, abastecida con 6 municiones y una escopeta retrocarga.
Tras las cuatro capturas en Trujillo y otra más en Lima, la policía continúa con los operativos en la ciudad. En horas de la noche, agentes de inteligencia llegaron hasta el establecimiento penal El Milagro para detener al suboficial de segunda Erick Solano, quien colaboraba con Los Pulpos. Este agente trabajó durante dos años en el Departamento de Investigación Criminal de Trujillo, viendo casos de robos y homicidios. Tras las sospechas, fue removido al destacamento del penal. También fueron intervenidas dos celdas, y se incautó importante documentación y pruebas sobre estos casos.
¿Quiénes son Los Pulpos?
La organización Los Pulpos no es nueva en la movida criminal de Trujillo. Jhonsson Smit Cruz Torres es hijo de Jhon Cruz Arce, alias “John Pulpo”, quien fue uno de los miembros de un clan familiar que opera criminalmente desde los años 90. Jhon fue uno de los más sanguinarios, pero fue capturado en el 2007 y el 2008 lo condenaron a 20 años de prisión por el crimen de su expareja. Actualmente purga su condena en el penal de Challapalca, en Tacna.
Esta peligrosa organización de sicarios, secuestradores, traficantes de terrenos y extorsionadores continuó operando con una serie de reestructuraciones, con nuevos cabecillas y miembros. Hoy uno de ellos es Johnsson, el hijo de “Jhon Pulpo”, por quien el Ministerio del Interior está pagando una recompensa de S/ 75 mil. Con 26 años y habiendo quedado en libertad tras ser atrapado en mayo del 2015 por la PNP, hoy es el responsable de un total de cinco secuestros en Trujillo.
Este es el detalle:
- Primer secuestrado: Luis Alberto Huamanchumo Salvatierra (64) FECHA: 4 de enero del 2021 (ASESINADO)
- Segundo secuestrado: Alan Miguel Angel Ríos Guevara (25) FECHA: 13 de noviembre del 2021 (LIBERADO)
- Tercer secuestrado: Marco Antonio Negreiros Castillo (22) FECHA: 15 de abril del 2022 (LIBERADO)
- Cuarto secuestrado: Manuel Rodríguez Cruzado (73) FECHA: 24 de junio del 2022 (ASESINADO)
- Quinta secuestrada: Nilda Alejandra Arrascue Espinoza (43) FECHA: 15 de noviembre del 2022 (RESCATADA)
Desde Trujillo, el jefe de la Dirincri, el general PNP Carlos Céspedes, dijo que esta banda es quizá la organización criminal más violenta y sanguinaria que está activa en el país. Según explicó, estos sujetos han operado básicamente en Trujillo, pero luego de que cometían sus secuestros, sus principales miembros se escondían en otras ciudades, como Lima.
El jefe de la Diviac, Franco Moreno Panta, fue uno de los policías que entró a la casa para liberación de la empresaria Nilda Arrascue. Él dijo que a partir de estas capturas, la PNP entrará en una nueva etapa para acabar con los tentáculos de toda esta peligrosa organización, pues en estos momentos se encuentran detrás de algunos otros miembros ya identificados y que son responsables directos de estos secuestros. El oficial dijo enérgicamente: “Nos vamos a seguir encargando, falta uno o dos. Pero ténganlo por seguro que pronto los vamos a capturar”.