Desde hace más de dos meses, el Ministerio de Cultura (Mincul) viene realizando la venta de entradas a los museos y sitios arqueológicos a través de una nueva plataforma. En Machu Picchu, esta decisión generó medidas de protesta, huelgas y la renuncia de la directora de la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) de Cusco, Maritza Rosa Candia. Era la DDC la entidad a cargo de la actual página de venta de boletos virtuales, una web obsoleta e incapaz de dar información precisa.
Estos hechos impulsaron a que el Mincul ordene la reorganización de la DDC y -de acuerdo con la ministra- a seguir con el plan de trasladar la venta de boletos a la novel web que busca unificar todos los sitios administrados por el Ministerio. Este miércoles 27 de diciembre, desde las 11 a.m., iniciará la venta a través de ‘tuboleto’ para la Llaqta de Machu Picchu. Previo a este anuncio, El Comercio conversó con Leslie Urteaga, ministra de Cultura, sobre los efectos de esta decisión.
Este 20 de diciembre iba a iniciar la venta de entradas a través de la nueva plataforma, pero se aplazó hasta el 2024. ¿Ya se tiene una fecha prevista para que esto suceda?
Será en los próximos días [la entrevista se realizó un día antes de que se anunciara oficialmente el inicio de la venta de boletos a Machu Picchu desde el 27 de diciembre]. Teníamos una fecha propuesta [de lanzamiento], pero eso significaba tener una familiarización con el entorno, sobre todo de los operadores turísticos. Ahora, la plataforma ya se viene utilizando para varios sitios [arqueológicos], pero en el caso de Machu Picchu hay operadores que deben [aun] conocer cómo utilizar la plataforma. Hemos realizado capacitaciones, pero [los operadores] aun necesitan un poco más de tiempo. Es por eso que decidimos aplazaron unos días.
Sin embargo, la plataforma ya está activa. La fortaleza de Kuélap estuvo con marcha blanca y lo estará hasta fin de año, ¿cierto?
Correcto, hasta el 31 de diciembre.
¿Y cuál es el objetivo que busca el Ministerio de Cultura con esa plataforma virtual?
Ya desde antes de la pandemia, el Ministerio de Cultura tenía un proyecto [para unificar la venta de entradas]. Se había propuesto al Ministerio de Economía y Finanzas un proyecto de inversión pública para tener en una sola plataforma para tener en un solo lugar toda la oferta cultural administrada por el Ministerio de Cultura. A la fecha, estos son 57 museos y también los sitios arqueológicos a nivel nacional. Se pretendió en ese momento tener una un proyecto de inversión, era el 2019 y habíamos hecho una proyección de que esto costaría, aproximadamente, unos 54 millones de soles. Eso significa no solamente tener el software, sino tener servidores en varios lugares del país que puedan tener el soporte adecuado. El proyecto estaba previsto para desarrollarse en tres años e incluía recursos de personal, brazaletes, ticketeras, todo lo que conlleva tener un servicio tecnológico informático de alto nivel.
Lamentablemente, en el 2020 nos agarró la pandemia a todos y se suspendió [lo avanzado]. Cuando hemos entrado a la gestión [en diciembre del 2022] hemos encontrado una capacidad de aforo [de la Llaqta] de 4.044 visitantes. Sin embargo, teníamos ya información de gestiones anteriores, de que la página web que maneja la Dirección de Cultura de Cusco no funcionaba muy bien, o no era tan eficiente. No necesariamente la información [de número de visitantes] que entraba a la página web se cotejaba con la que [realmente había].
Lamentablemente, la página [de la DDC] en estos años no ha podido ser repotenciada, no cuenta con un soporte informático que le dé seguridad, que le dé también la trazabilidad que necesitamos [para] conocer el perfil del turista. Estas deficiencias de la página nos llevan a tomar una decisión en esta gestión y evitar más problemas como los que hemos tenido en julio y en agosto. Decidimos entonces hacer una contratación que está bajo la Ley de Contrataciones del Estado. El mercado ofrece el alquiler de [landing pages], entonces hicimos una licitación y ganó la mejor oferta, que era la más económica, que era de Joinnus.
Esta decisión ha motivado una serie de situaciones adversas con la Dirección Desconcertada de Cultura. ¿Qué sucedió?
La señora Maritza [Rosa Candia, extitular de la DDC de Cusco] tenía conocimiento [del proyecto] y lo que hemos visto ahora es que parecería que no se les ha informado a los equipos internos de la Dirección de Cultura que esto [el cambio de plataforma] iba a suceder. La sede central [del Mincul] está asumiendo todo lo que corresponde a la presentación y los importes que correspondan a esta página principal donde vas a encontrar todo. Justamente porque la sede central es la que tiene a cargo la administración de los monumentos de todo el país y las unidades ejecutoras o las direcciones desconcentradas de Cultura [están a cargo] de la parte administrativa, la parte de recursos humanos. Pero no significa que sean entidades independientes, de ninguna manera. Tienen que seguir la línea de política pública que considera la sede central.
Además de la renuncia de la señora Candia, también se han realizado manifestaciones por parte de los trabajadores de la DDC.
Nosotros hemos sacado varios comunicados durante los últimos días y uno de ellos declaramos ya la reorganización de la Dirección de Cultura. Al tener esta información que nos lleva a dudar de los números y de conocer cómo se ha estado [administrando] durante los últimos años esta página web [de la DDC], decidimos reorganizar [la entidad]. Al emitir este comunicado, al día siguiente la señora [Rosa Candia] presentó su renuncia irrevocablemente, indicando que es una decisión centralista o autoritaria. Nada más lejos de la realidad. Hay documentación, que no he tenido por qué sacar, pero hay documentación que está en los archivos del Ministerio desde septiembre, octubre, noviembre, que se le pide información [sobre la nueva plataforma] y ella contesta que se estaba viendo. Incluso, ella [Rosa Candia] ha conversado directamente con el alcalde, como representante del Ministerio de Cultura, para comentarle al señor alcalde de Machu Picchu que estamos trabajando en la nueva plataforma. Entiendo que la respuesta ha sido también en relación al comunicado en el que se decide la reorganización de dos sistemas que tiene la Dirección de Cultura de Cusco, sistemas no solamente informáticos, sino también administrativos.
Me llama poderosamente la atención de que el mismo sindicato, o en todo caso algunas personas del sindicato de trabajadores, prefieran seguir con una plataforma que no está realmente adecuada para atender a nuestros visitantes nacionales y extranjeros, y seguir con este problema. Hay denuncias desde hace mucho tiempo [de] mafias entre algunas personas del Ministerio, desde la Dirección de Cultura de Cusco, con algunas agencias [de turismo] que no son formales. O que se puedan haber estado vendiendo boletos no dentro del sistema. Eso sí me preocupa y me fortalece en relación a esta reorganización y a la necesidad de tener una nueva plataforma.
Necesitamos información y necesitamos información fiable, con una plataforma segura, auditable, que pueda darnos información verídica que no tenga ningún halo de duda de si están entrando personas por otro lado sin entrar el sistema. Por otro lado, nos va a ayudar a conocer mejor el perfil del visitante.
Desde que se anunció el cambio de plataforma se han registrado manifestaciones, en las que se habla de la “privatización” de Machu Picchu y un “monopolio”. ¿Cuál es la postura del Ministerio ante esto?
Rechazamos esas afirmaciones. La gestión y la administración de los monumentos arqueológicos y el patrimonio cultural de la Nación está a cargo del Ministerio de Cultura. Lo que estamos haciendo aquí es utilizar tecnología mejorada para brindar un mejor servicio.
[Se ha motivado a los manifestantes] a través de malas informaciones que pretenden influenciar en aquellas personas que viven del turismo. Se les dice que tenemos que parar [el cambio de plataforma] porque la reorganización va a traer consecuencias para ellos, que van a perder de sus [trabajos]. Nada más falso. Por el contrario, necesitamos manos, necesitamos mucho trabajo en la plataforma. Además, estamos reduciendo la brecha digital en todos los otros sitios [arqueológicos y museos que están en la página web]. Asimismo, seguirá estando nuestro personal que atiende las boleterías, que ayudará a las personas a conocer la plataforma y, si es [necesario], ese mismo personal entra a la plataforma, entra al sistema y hace la compra por parte de las personas.
Incluso se puede pagar con billeteras digitales y vamos a tener la posibilidad de [tener información a tiempo real]. Si yo, como ministra, quisiera saber cuántas personas hay en Machu Picchu, en cada circuito, no podría hacerlo [actualmente] si es que no le pregunto a la directora de la DDC de Cusco, y esta a su vez no le pregunta al otro equipo que tiene a cargo el sistema informático, y estos a su vez hacen todo el análisis. Así, no llegamos a conocer realmente cuántas personas entran por circuito, que es lo más importante para mejorar la experiencia positiva que todos queremos que se lleven nuestros visitantes nacionales y extranjeros.
Es más, en el pueblo de Machu Picchu siempre se ha pedido que se le respete sus mil boletos para la venta presencial. No es solo que el visitante llega y va al lugar [de venta] y le venden un boleto de manera presencial. En el Centro Cultural de Machu Picchu, que están ahora con cinco ventanillas, entran a la página web [actual] y a través de esa página venden esos boletos. [Con el cambio, va a haber] una aceptación, un respeto por esos mil boletos que se siguen vendiendo de manera presencial en Machu Picchu Pueblo. Pero igual es importante decir que no estamos vendiendo [actualmente, en temporada baja] más de 200 boletos en [de manera presencial].
Y en temporada alta ese número se acerca al 50%, ¿cierto?
Sí, a unos 500 y 600 [boletos]. Pero hemos visto imágenes terribles que han dado la vuelta al mundo, diciendo que Machu Picchu pues está abarrotada, que no hay tickets. Pero cuando vemos el cotejo del sistema que maneja la Dirección de Cultura [de Cusco], no llegamos ni a 3.700 [visitantes al día en Machu Picchu]. Estamos hablando de información que por muchos años no ha sido real. Ya tenemos un primer informe de Contraloría, tenemos que hacer ahí una revisión. La reorganización [de la DDC Cusco] nos va a ayudar en eso.
¿La plataforma de ‘tuboleto’ será permanente?
A mí como ministra me hubiera gustado que ese proyecto de los cincuenta y tantos millones [de soles] continúe y que nosotros tengamos una plataforma robusta que le de soporte a todos los visitantes que tenemos a nivel nacional. Pero esta [la página de Joinnus] es una opción que nos está dando la tecnología para que podamos seguir trabajando en este sistema, que, ojalá, la sede central lo pueda tener pronto. Tenemos un contrato de un año que ya ha empezado, porque la plataforma ‘tuboleto’ ya está activa hace varios meses. Ya el tiempo está pasando, lo que necesitamos es más bien transferir la información
Finalmente, ministra, ¿cuánto tiempo le ahorrará a un turista adquirir su boleto a través de la nueva plataforma?
La plataforma que ha sido utilizada por el DDC de Cusco se cuelga a veces, se va, la página no se puede ver, no se vuelve a cargar. [La nueva plataforma] va a mejorar muchísimo el tiempo de espera para adquirir el boleto. Primero nos registramos [en la web] a través de un correo electrónico, al correo electrónico les va a llegar una clave de acceso y van a tener un usuario. A través de este usuario se va a poder acceder a todas sus compras virtuales de servicios culturales. Una vez que se accede a la plataforma y se elige el boleto o el circuito correspondiente y se paga, va a llegar el ticket al correo electrónico.
Esto significa tener la seguridad de que el boleto está en mi teléfono o está en mi correo electrónico o lo puedo imprimir. No hay todos estos problemas que hemos tenido con la con la [otra] plataforma. Teníamos que imprimirlo [el boleto] siempre, la persona no lo podía perder porque si no automáticamente tenía que comprar otro boleto y de eso también tenemos varios reclamos.
Con esta nueva medida, ¿se ampliará el aforo de los visitantes a Machu Picchu?
El aforo sigue siendo de 4.044 personas al día. Este es el aforo máximo, pero como te digo, lamentablemente, no hemos llegado a ese aforo, no hemos llegado ni a 4000 personas en el día más este visitados, según la página web del la DDC de Cusco. Esperemos, de acuerdo con las proyecciones que hemos tenido y también a los informes técnicos que se han recibido de los especialistas, que para el próximo año la capacidad del aforo sea 4.500 personas al día. Así lo estamos proponiendo.