Ocho fiscalizadores de la Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran) y el chofer que los movilizaba vivieron el terror en la noche del martes. En el retorno de un operativo en el distrito de Curahuasi, provincia de Abancay (Apurímac), la van donde se transportaban fue emboscada en la vía Cusco - Curahuasi - Abancay, sector de Waraccoña, por una docena de personas que prendieron fuego al vehículo. Rony Revilla Bravo falleció calcinado y sus colegas muestran quemaduras de gravedad.
Henry Araujo, presidente del sindicato de la Sutran, informó a Latina Noticias que el chofer de la unidad presenta un traumatismo encefalocraneano, mientras otros tres fiscalizadores “no van a quedar bien” por la gravedad de sus quemaduras. “Siempre atacan a la Sutran, cada vez que intentamos fiscalizarlos [a los transportistas]. Muchas veces vamos así, sin apoyo policial”, sostuvo Araujo.
La Red Asistencial de EsSalud comunicó que seis agentes de la Sutran fueron trasladados al Hospital II Abancay. Debido a la complejidad de sus casos, los pacientes R.C.L de 58 años y E.H.C de 39 fueron referidos al Hospital Adolfo Guevara de EsSalud Cusco. El herido J.Y.Q de 37 años también sería derivado a dicho nosocomio.
Un crimen planificado
Si bien los hechos aún están siendo investigados, se presume que el acto fue una represalia por parte de transportistas informales. La unidad de la Sutran se topó con unos troncos en la pista que impidieron su paso, cuando aparecieron los delincuentes alrededor. En minutos, los criminales echaron combustible al vehículo y se suscitó el infierno.
“El vehículo, en un inicio, fue apedreado. Luego, un grupo de los diez a doce sujetos rompieron la luna del conductor, a quien bajaron y golpearon [mientras] otros rociaban con gasolina la parte externa e interna de la van sabiendo que dentro de la van había ocho personas. [Solo] siete lograron salir, quedando uno que murió calcinado”, relató el jefe del Frente Policial Apurímac, general PNP Reynaldo Santos Villalta.
Según la hipótesis del efectivo policial, el ataque habría resultado de la “impotencia” de los propios transportistas informales que son fiscalizados, quienes habrían planificado este ataque en represalia. En comunicación con El Comercio, Martín Ojeda, gerente general del Gremio de Transporte Interprovincial, sostuvo que “en los últimos siete años las agresiones han ido en aumento. Esto ha ido desde la falta de respeto de la autoridad hasta la agresión física y violenta”.
Asimismo, Ojeda reveló que la Sutran había realizado un operativo contra el transporte ilegal en la misma zona dos días atrás. “Debido a este operativo, [los transportistas ilegales] contrataron a estos sujetos. Ellos no solamente se han contentado con quemar la unidad, sino que cuando salieron [los fiscalizadores], les han tirado gasolina afuera del vehículo”, sostuvo.
El Ministerio Público informó que la Primera Fiscalía Provincial Penal de Abancay inició las indagaciones contra los que resulten responsables del presunto delito de homicidio calificado, ocurrido en Tamburco, distrito adyacente al municipio de Abancay. Asimismo, el Ministerio del Interior ha dispuesto que personal de la División de Homicidios de la Policía Nacional del Perú viaje al lugar para apoyar en las diligencias.
Garantizarán equipos de seguridad
“Ronny Revilla falleció cuando retornaban [el equipo de fiscalizadores] a su base en Abancay. Nosotros siempre hacemos intervenciones con la Policía Nacional, [pero] no se pensó jamás era que en el desplazamiento de regreso iba a ocurrir este asesinato y, en el caso de los heridos, un intento de homicidio”, sostuvo el ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes.
“Lo que vamos a tener que hacer es desplazarnos conjuntamente con equipos de seguridad propios de Sutran y también con el apoyo de la PNP. La informalidad en el transporte cree que la generación de actividad económica justifica que se pueda hacer cualquier cosa, aun cuando ponen en riesgo la vida de las personas”, agregó el funcionario.
Violencia constante
El ministro también resaltó que ayer fue agredido otro equipo de fiscalizadores de la Unidad Desconcentrada Cusco de la Sutran en Cusco. A la altura del kilómetro 941 de la carretera Longitudinal de la Sierra Sur, un grupo de maleantes atacó con palos y piedras la unidad en la que se movilizaban los funcionarios.
El jefe de la Unidad Desconcentrada de la Sutran Cusco, Handersson Casafranca, deploró la agresión a los inspectores y pidió a las autoridades a sancionar ejemplarmente a los responsables. Asimismo, reveló que durante el ataque los inspectores sufrieron el robo del equipo cinemómetro de la entidad, dispositivo empleado para la medición de la velocidad de los vehículos, el mismo que fue recuperado posteriormente por los efectivos policiales.