El martes, las noticias consternaron a los ancashinos. En Huaraz, el consejero regional Francisco Espinoza Montesinos perdía la vida a causa del coronavirus, después de estar internado una semana en una clínica de esa ciudad. En tanto, ese mismo día en el Hospital Regional Eleazar Guzmán Barrón en Nuevo Chimbote, fallecía el exconsejero regional Juan Chuiz Villanueva. Las muertes de ambas personalidades se unieron a la lista trágica de personas que fallecen por la pandemia.
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Estos días, en particular, están siendo duros para la región. Siguiendo, por ejemplo, con la lista de personalidades, el lunes murió Juan Armijo Sotomayor, un reconocido promotor cultural en Chimbote, y un día antes, el domingo, falleció el excongresista ancashino Víctor Crisólogo Espejo.
“La situación aquí es crítica. Nosotros contábamos con ocho camas UCI [unidad de cuidados intensivos], ahora hemos llegado a 14 camas, pero todas están ocupadas en el Hospital Regional”, le dijo a El Comercio Leandro Pérez, presidente del Cuerpo Médico de este hospital.
“Hay 20 personas en espera de camas UCI. La situación es incontrolable”, agregó.
El también presidente de la Federación Médica en Áncash (para la zona de costa) indicó que aún aumentando el número de camas UCI, no se solucionará el problema, pues hay un incremento notable de pacientes, incluso familias van a atenderse al Hospital Regional.
En tanto, en diálogo con este Diario, Luis Johanson Arias, decano del Colegio Médico en Áncash, sede Chimbote, señaló que “a groso modo, nosotros en la zona costa tenemos aproximadamente el 75% de pacientes contagiados de la región, el otro 25% se encuentra en la zona sierra”.
Luis Johanson indicó que los jóvenes, entre 20 a 25 años de edad, son los más afectados por el coronavirus en esta segunda ola. Mientras, Leandro Pérez refirió que mayormente las personas adultas, entre 70 y 80 años, son las que están muriendo y que los pacientes están llegando a los hospitales en una condición en la que es muy difícil salvarles la vida.
Hasta el momento, según datos de la Dirección Regional de Salud (Diresa) Áncash, en la región 47.078 personas han sido diagnosticadas con COVID-19 y 2.036 han muerto por esta enfermedad. Tiene una tasa de letalidad de 4,32%. Es decir, como promedio, cuatro personas fallecen por cada cien contagios.
Junto con Ica, Junín, Lambayeque, Lima Regiones, Piura y Tacna, Áncash ha sido categorizada con la alerta muy alta por el avance de la segunda ola de la pandemia, según disposición del Ejecutivo.
¿Qué están haciendo las autoridades?
El titular de la Diresa Áncash, José Morales, le dijo a El Comercio que se ha activado un plan para enfrentar la segunda ola en el primer nivel de atención médica para evitar que los pacientes lleguen a los hospitales.
“[…] como estrategia, estamos saliendo en busca de los casos a nivel de toda la región para captarlos en la etapa leve y moderado, ser internados y ser recuperados en esa etapa, para que no lleguen a ocupar una hospitalización en las camas de UCI, ni hospitalización severa, y su recuperación también sea alta, pasar la morbilidad y, por ende, la letalidad, y haya menos muertes en la región”, indicó.
Morales confía que con esta estrategia se podrá detener el incremento de los contagios de coronavirus.
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Señaló que en la región, hay unas 46 camas UCI, 24 de las cuales están en el Ministerio de Salud (Minsa), esto es, 10 en el Hospital Víctor Ramos Guardia (Huaraz) y 14 en el Hospital Regional Eleazar Guzmán Barrón (Nuevo Chimbote).
El funcionario indicó que en las próximas horas se implementarán 10 camas UCI más en el Víctor Ramos Guardia.
“En el tema de recursos humanos no hay problema. Hemos recibido una transferencia del Ministerio de Salud, más o menos 3 millones de soles […] También con el gobernador encargado, el señor Henry Borja, se ha trabajado un presupuesto, que es el presupuesto del canon minero para los recursos humanos”, precisó.
Por su parte, Leandro Pérez afirmó que el Comando COVID-19 Áncash está desactivado desde que el gobernador regional Juan Carlos Morillo fue encarcelado.
En su opinión, este grupo de trabajo debe estar liderado por médicos, uno en la costa y otro en la sierra de Áncash.
“Necesitamos que se conforme este Comando COVID, que tiene que articular, porque no es posible que en el centro de salud le den al paciente un tratamiento, en otro le den otro tratamiento y no haya una uniformidad”, refirió.
¿Se debe volver a una cuarentena total en Áncash?
El titular de la Diresa, José Morales, indica que desde el punto de vista de salud, está de acuerdo con que se aplique esta medida en Áncash. No obstante, agregó que también se evalúa el factor económico y que eso importa mucho al momento de tomar esta decisión.
Leandro Pérez también se mostró a favor de que la región vuelva a acatar una cuarentena, por lo menos por unos 15 días, particularmente en Chimbote y Nuevo Chimbote, donde la pandemia golpea más fuerte en estas semanas.
Estimó que si no se vuelve a una cuarentena, el riesgo es que en febrero los hospitales colapsen por la pandemia.
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El decano del Colegio Médico, sede Chimbote, Luis Johanson Arias, dijo estar en desacuerdo con una cuarentena total, pues en la primera ola ha demostrado que no es muy efectiva. “Además, las personas, con todo derecho, tienen que trabajar, y nuestro país se caracteriza por ser muy informal”, señaló.
Opinó que lo se puede hacer son cuarentenas focalizadas, con zonas donde se aísle a las personas infectadas en condiciones adecuadas hasta que se recuperen. “Eso significa que debe tener alimentación, comunicación, asistencia médica, y eso es lo que no se les está dando. Por eso la gente rechaza estos aislamientos, porque no tiene cómo mantenerse”, expresó.