La promoción de la competencia en los mercados es uno de los ejes centrales en la estrategia de desarrollo económico del país: una competencia dinámica que beneficie a todos los peruanos. Así lo asumimos en el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi), y con ese postulado orientamos nuestro trabajo.
El ingreso de nuevas empresas al mercado es un punto a favor en esta tarea, y la mejora en el desempeño de las que ya están instaladas también lo es. Para viabilizar este objetivo, el Indecopi se enfoca en varios frentes. En este momento, destacan especialmente dos. Por un lado, a través de las comisiones de eliminación de barreras burocráticas (CEB) fiscalizamos y sancionamos ‘ex post’ barreras burocráticas ilegales o irracionales impuestas por entidades públicas que afectan el desarrollo de las actividades económicas y la simplificación administrativa. Por otro lado, la institución elabora documentos de abogacía (observatorios) que valoran la problemática de las barreras, trabas y cuellos de botella en sectores claves, como transportes y telecomunicaciones, para informar a los sectores de lo que está en juego al no eliminarlas o reducirlas.
En efecto, en el 2013, las CEB a escala nacional declararon barreras burocráticas ilegales o irracionales los requisitos impuestos por la autoridad sectorial, que ponían en juego la permanencia de empresas de servicio de transporte interprovincial de pasajeros. Un total de 38 resoluciones identificaron barreras que fueron confirmadas por la segunda instancia, valorizándose el costo ahorrado a los afectados en casi S/.128 millones, estimado sobre la principal barrera que obligaba a los transportistas a satisfacer un patrimonio mínimo de mil UIT (más de S/.3,7 millones) para permanecer en el mercado. Asimismo, se declaró la inaplicación de 209 barreras en el último año, con un ahorro para los afectados directos de S/.131 millones. Todo esto se complementa con la campaña en provincias mediante un programa planificado de capacitaciones y metas concretas.
Asimismo, en la vertiente proactiva de la autoridad de competencia resalta la reciente publicación del “Observatorio de Antenas”, elaborado por la Gerencia de Estudios Económicos, en el que se identifican un total de 11 cuellos de botella de 33 municipalidades de Lima y provincias que dificultan el despliegue de las inversiones en infraestructura de comunicaciones móviles.
Las cifras en este caso son realmente reveladoras. Como mínimo, los gastos burocráticos para poner una antena de comunicaciones móviles para servicios de transmisión de voz e Internet asciende a casi S/.12 mil. Multipliquemos ese valor por un total de 14 mil antenas: el resultado es que las empresas del sector tendrían que gastar más de S/.166 millones solo en trámites burocráticos.
¿No sería mejor para el país que se puedan invertir dichos recursos en actividades productivas?
Como aporte, el Indecopi ha trasladado esa información a las instancias competentes. Con ello, y con el trabajo expuesto en tareas de fiscalización, aportamos a mejorar el clima de negocios e impulsar el desarrollo del país, lo que facilitaría el desarrollo de las actividades económicas (inaplicación de barreras burocráticas ilegales e irracionales e identificación y valorización de trabas), consolidaría el sistema de protección al consumidor, afianzaría la libre competencia; y protegería y promovería la propiedad intelectual, con el fin de generar mercados competitivos y bienestar para todos los peruanos.