Durante más de 17 años Tareck El Aissami fue uno de los políticos más poderosos de Venezuela, una figura relevante dentro de la cúpula del chavismo. Estuvo al lado de Hugo Chávez primero y después asumió importantes puestos de Gobierno durante el régimen de Nicolás Maduro, hasta que en el 2023 cayó en desgracia. El epílogo de su carrera política llegó este martes, cuando la Fiscalía anunció que había sido detenido. ¿Qué pasó?
El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, informó que el arresto del exministro de Petróleo se dio por su supuesta participación en una trama de corrupción en el sector petrolero.
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Junto a El Aissami, de 49 años, fueron detenidas otras dos personas cercanas a la cúpula del Gobierno de Maduro: Simón Zerpa, expresidente del Fondo de Desarrollo Nacional (Fonden), una empresa estatal creada en el 2005 para financiar proyectos de inversión de gran envergadura, pagar deuda pública externa y atender otras situaciones especiales. Y el empresario Samark López Bello, un operador financiero por el que Estados Unidos ofrece una recompensa de US$ 5 millones por información que lleve a su arresto; la Oficina de Control de Activos de Extranjeros (OFAC) lo acusa de ser un cabecilla del narcotráfico.
El fiscal Saab mostró imágenes del momento de la detención de El Aissami, donde se le ve esposado, vestido con camiseta y pantalón deportivo, mientras es escoltado por dos funcionarios con el rostro cubierto.
“Hemos logrado que se develara la participación directa” de El Aissami y “la consecuente detención” para “ser presentado e imputado por el Ministerio Público”, informó Saab.
El fiscal afirmó que los tres serán imputados por los delitos de traición a la patria, apropiación o distracción del patrimonio público, alarde o valimiento de relaciones o influencias, legitimación de capitales y asociación. La pena máxima por estos delitos es de 30 años de cárcel.
Cabe precisar que Tareck El Aissami renunció a su cargo de ministro de Petróleo el 20 de marzo del 2023, tras el anuncio de investigaciones judiciales por irregularidades en la venta de crudo a través de criptoactivos, un caso que según la prensa representó un desfalco de más de 15.000 millones de dólares.
También puso a disposición su cargo en la dirección del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Desde entonces, no volvió a aparecer en público.
¿Quién es Tareck El Aissami?
Tareck El Aissami nació el 12 de noviembre de 1974 en El Vigía, estado Mérida. Es abogado, criminólogo y político de ascendencia siria y libanesa.
Tiene una larga trayectoria política en el chavismo prácticamente desde el inicio de la gestión del presidente Hugo Chávez (1999 -2013) e incluso se le mencionó como un potencial candidato presidencial en lugar de Maduro:
- 2003, dirige la Misión Identidad
- 2006 - 2007, diputado en la Asamblea Nacional
- 2007 - 2008, viceministro de Seguridad Ciudadana
- 2008 - 2012, ministro del Interior
- 2012 - 2017, gobernador de Aragua
- Enero 2017 - junio 2018, vicepresidente de Venezuela
- Desde junio 2017, vicepresidente sectorial de Economía
- Desde junio 2018, ministro de Industrias y Producción Nacional
- Abril de 2020 - marzo 2023, ministro de Petróleo, presidente de PDVSA
El cargo más relevante que desempeñó durante el Gobierno de Chávez fue el de ministro del Interior, entre el 2008 y el 2012.
Mientras que con Maduro ha sido vicepresidente del país (2017 - 2018), ministro de Industrias y Producción Nacional y finalmente ministro de Petróleo (2020 - 2023), desde donde también controlaba la empresa estatal más poderosa del país, Petróleos de Venezuela (PDVSA).
En el 2017, durante el gobierno de Donald Trump, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos designó a Tareck El Aissami como narcotraficante internacional y lavador de activos en virtud de la Ley Kingpin, junto a su socio Samark López Bello.
Estados Unidos considera a López Bello como testaferro de El Aissami.
De acuerdo con la OFAC, El Aissami facilitó cargamentos de narcóticos desde Venezuela, incluyendo control de aviones que salieron de una base aérea venezolana y rutas de drogas mediante los puertos en ese país.
En sus antiguas posiciones, dice la OFAC, El Aissami supervisó o fue dueño parcial de cargamentos de narcóticos de más de 1.000 kilogramos enviados desde Venezuela en múltiples ocasiones, incluyendo aquellos con destino a México y Estados Unidos.
El Aissami respondió mediante un anuncio pagado en el diario estadounidense “The New York Times” donde aseguró que las autoridades estadounidenses habían sido engañadas por sectores interesados en que las relaciones con Venezuela no se restablecieran.
También sostuvo que cuando fue ministro del Interior la lucha contra las drogas alcanzó “el mayor progreso de nuestra historia”.
A pesar de esa seria acusación, El Aissami recibió el respaldo de Maduro y siguió desempeñando cargos ministeriales en Venezuela.
El el 2019, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) lo incluyó en su lista de los 10 fugitivos más buscados.
En el 2020, Estados Unidos ofrecía US$ 10 millones por información que condujera a su arresto.
¿Cuál es la acusación de la Fiscalía de Venezuela?
En marzo del 2023, la Fiscalía de Venezuela anunció más de 50 de detenciones por una supuesta trama corrupta en el interior de PDVSA, el caso fue bautizado por las autoridades como PDVSA-Cripto. El martes, el fiscal Saab dijo que el arresto de El Aissami y las otras dos personas forman parte de la segunda fase de la investigación.
Saab calificó a El Aissami como el “jefe del pranato (organización delictiva)” de esta trama corrupta.
Dijo que la captura del exministro se consiguió tras una delación de cinco testigos, que “han pasado a ser testigos de oro”.
El fiscal sostuvo que El Aissami y sus presuntos cómplices supuestamente “enviaban al extranjero maletas con efectivo y oro”.
También los vinculó con “una red de prostitución de jóvenes de nacionalidad venezolana y extranjeras”.
De acuerdo con la investigación, se detectó el uso de monedas digitales o criptomonedas como método para pasar desapercibidos por los sistemas de control financiero.
“Comercializaban crudo asignado ilegalmente de la estatal Petróleos de Venezuela y luego habilitaban un conglomerado de sociedades mercantiles para legitimar el dinero obtenido de dichas ventas por medio de la obtención de cripto-activos, bienes muebles e inmuebles e inversiones en el sector construcción”, manifestó Saab.
El fiscal general sostuvo que se asignaron de manera ilegal contratos, cargamentos de crudo, coque y fuel oil. Vendieron esos productos por debajo del valor del mercado y manejaron arbitrariamente los fondos obtenidos por la transacción.
“Valiéndose de sus cargos, desviaban fondos del Estado a través de supuestos proveedores de empresas de maletín los cuales no cumplían con los requisitos para contratar con el Estado, causando obviamente un daño patrimonial incalculable en millones de dólares”, aseguró el fiscal general.
Saab precisó que hasta ahora han sido acusadas 54 personas y que han sido emitidas otras 17 órdenes de detención.
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