El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha dedicado gran parte de sus discursos de estas últimas dos semanas en atacar a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), una de las más importantes del país y de la que él mismo egresó, por haberse “derechizado” y “aburguesado”, según él.
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El 21 de octubre el mandatario arremetió por primera vez contra la casa de estudios, señalando que ha perdido su esencia de formar profesionales dedicados al pueblo y, a cambio, dedicarse a defender proyectos neoliberales.
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La respuesta no se hizo esperar, siendo el exrector de la UNAM José Narro Robles quien no dudó en señalar que los dichos del presidente estaban cargados de “intencionalidad” y asegurando que la UNAM “tiene una gran vocación social, la cual ha demostrado de muchas maneras”.
El actual rector, Enrique Graue, también respondió aunque de forma menos directa, aprovechando la inauguración de la 24° Exposición de Orientación Vocacional “Al Encuentro del Mañana 2021″.
“El encuentro esta diseñado para que puedan tener una buena decisión vocacional y así consolidar anhelos, empatar aptitudes y afianzar sus gustos y preferencias con la amplia gama de oferta educativa (...) La UNAM responde al llamado de la sociedad que demanda una separación colectiva y la formación de cuadros competentes y comprometidos por la prosperidad de la nación”, dijo Graue.
Las reacciones, lejos de persuadir a AMLO, provocaron que el discurso se volviera aún más directo. En una nueva rueda de prensa desde la sede del Gobierno, el mandatario dijo estar “absolutamente seguro” de que la UNAM “se derechizó”.
“Se llenaron las facultades de Ciencias Sociales de conservadores (...) Empezaron a querer cobrar colegiaturas, ¿De dónde surgió? Pues de la política neoliberal (...) Estaba dominada la UNAM por lo más retrógrado que había y sigue existiendo”, dijo ante la prensa.
En un comunicado, la universidad defendió ser un centro que acoge distintas ideologías y corrientes de pensamiento, destacando el espíritu crítico que cultivan en sus aulas. Además, le recordó el aporte que ha tenido para el país como los brindados tras el terremoto de setiembre del 2017 y durante la actual pandemia de COVID-19.
CRUCE DE PALABRAS
El martes 26, en lo que fue la cuarta conferencia matutina en la que dirigía palabras contra la UNAM, AMLO lanzó un reto para los “ofendidos” por sus palabras, en referencia a los llamados en redes sociales a organizar una manifestación contra el mandatario.
“Dicen ‘nos ofende el presidente, vamos a marchar contra el presidente’. Ojalá lo hagan, aunque sea por marchar contra nosotros, pero que hagan algo. Porque el conservadurismo genera una especie de inercia política. Claro que hagan algo, porque se aburguesaron”, señaló según un artículo de Forbes México.
“Lo sostengo, claro que se derechizó en el periodo neoliberal porque no dijeron nada durante el saqueo más grande de México. Ayúdenme a encontrar los libros de la UNAM durante el periodo neoliberal cuestionando la corrupción que imperó a lo largo de 36 años”, continuó.
“A ver cuántos tratados, libros, ensayos sobre la corrupción, sobre la entrega de bienes de la Nación a particulares en el gobierno de (el expresidente Carlos) Salinas (de Gortari). No van a encontrar muchos, porque Salinas cooptó a la mayoría”, agregó AMLO.
APUNTA AL RECTOR
El miércoles 27, en una nueva presentación donde abordó el tema, AMLO pareció relajar el discurso contra los estudiantes de la UNAM pero enfiló hacia el rector Enrique Graue.
Según un artículo del diario “El Financiero” de México, el mandatario acusó a Graue de estar vinculado a irregularidades en el presupuesto de la universidad y a cobrar un sueldo mayor a 200 mil pesos, equivalente a unos US$9.800.
Durante su alocución, AMLO quiso despejar dudas sobre un supuesto irrespeto a la autonomía de la institución y hacia el sistema educativo público. “Nosotros vamos a seguir siempre respetuosos de la autonomía universitaria, vamos a seguir impulsado la educación pública”, aseguró.
Sin embargo, estos últimos mensajes parecieron llegar tarde, pues diversos grupos en redes sociales convocaron a un paro de actividades de 48 horas en la UNAM bajo etiquetas como #UnamSocial y #UNAMHuelgaGeneral, reportó el periódico mexicano “Milenio” en su portal web.
Pese a ello, agrega el diario, las agrupaciones estudiantiles y el sindicato de trabajadores de la UNAM no se han sumado a la convocatoria y aseguran desconocer a los organizadores.
¿IMPULSO O ESTRATEGIA?
Las palabras de AMLO contra la UNAM no solo han causado sorpresa por la aspereza de la que han ido cargadas, sino también por lo que representó el voto universitario en su triunfo electoral del 2018.
Un estudio realizado en el 2018 por la empresa de investigación Parametria revelaba que el perfil del votante por AMLO era el de “hombres de entre 26 y 35 años, con escolaridad universitaria y mayores ingresos”.
Por otro lado, un sondeo hecho en el 2019 por la Universidad Veracruzana demostraba que 6 de cada 10 estudiantes de instituciones públicas aprobaba la gestión de AMLO, luego de su primer trimestre en el poder.
Sin embargo, una nueva encuesta realizada este año por el diario El Financiero reveló cómo AMLO y Morena habían perdido el respaldo universitario. Los resultados del sondeo mostraron que el apoyo del partido oficialista entre universitarios había caído del 48% obtenido en el 2018 al 33% durante las elecciones federales del 6 de junio de este año.
Para el periodista de dicho diario, Enrique Quintana, esta sería una de las razones por las que AMLO apunta sus armas contra los universitarios.
“Hoy el presidente pareciera estar en la disposición de quemar naves. De romper por entero con la visión de los universitarios y de asumirlos como adversarios (...) Probablemente, una de las posibilidades es que proyecte para la campaña del 2024 con una visión en la cual ponga de un lado a lo que él genéricamente denomina ‘el pueblo’, lo que significa sobre todo un conjunto de segmentos de la población con los ingresos más bajos y también baja escolaridad, y del otro lado coloque al resto de la población, incluyendo a las clases medias, que han tenido como una de sus fuentes importantes a los egresados de la UNAM”, escribió Quintana en su columna del 27 de octubre.
“Las clases medias de México, especialmente quienes han sido egresados de las universidades públicas, y que hoy se han convertido en críticas del gobierno luego de haberlo respaldado en el proceso electoral de 2018, han roto en muy amplios segmentos con el gobierno de López Obrador. Y él está siendo consecuente con ese hecho y rompiendo con los universitarios”, agrega el periodista.
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