La SIP cuestiona la calidad de las democracias en Latinoamérica

Santiago de Chile, EFE

La calidad de las democracias imperantes en algunos países de América Latina y el derecho al ejercicio de la libertad de expresión fueron cuestionados hoy en un panel de la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) que se realiza en Santiago de Chile.

Representantes de distintos medios de comunicación y organismos vinculados a ellos pusieron en duda que el hecho de que Gobiernos elegidos democráticamente en la región respeten en el ejercicio del poder la libertad de prensa en sus distintas expresiones.

Joaquín Morales, de la "Gaceta de Tucumán", Argentina, señaló que Latinoamérica no presenta un bloque uniforme de países democráticos con similares características.

"Sí hay un condimento común que es que hay elecciones, pero no todos esos son regímenes políticos que actúan bajo el sistema propio de la democracia sino bajo un liderazgo amenazante que decide las normas de la democracia", señaló.

Entre este tipo de Estados mencionó a Argentina, Venezuela, Ecuador, Nicaragua y, "en alguna medida Bolivia".

"¿Se puede llamar democracia a un país que persigue a los medios porque no obedece a los controles del Estado?", se preguntó Morales.

A su entender, eso no ocurre y atenta directamente contra el ejercicio del periodismo libre y de la autonomía de los contenidos de los medios.

"Yo digo que no son democracia por más legitimidad de origen que tengan, porque no la practican al ejercer el poder", afirmó el periodista argentino.

"Si se agrede la libertad de expresión se agreden todas las libertades", agregó.

Según Morales esa es la situación que se está viviendo actualmente en Argentina por parte de los medios que no adhieren al Gobierno de Cristina Fernández.

"Soy un periodista argentino donde la prensa está en una permanente situación de libertad condicional. Somos permanente perseguidos por los aparatos de seguridad", aseguró.

"El periodista catalogado de enemigo por el régimen ve impedidas de inmediato todas el acceso a todas sus fuentes de información", añadió.

El profesional sostuvo que hay un riesgo permanente para los medios de comunicación independientes por el afán del Gobierno de controlarlos, así como una veda de avisaje público.

Morales indicó también que si se monopoliza la industria del papel los medios escritos que se consideran independientes no tendrían posibilidad de seguir funcionando.