San Salvador. El sabotaje al transporte público fue suspendido por las pandillas en El Salvador luego de más de tres días que dejaron 11 muertos y pérdidas económicas considerables, informaron hoy medios locales.
El paro o sabotaje al transporte público fue impulsado por las pandillas o maras desde el lunes pasado y su efecto se hizo sentir especialmente en San Salvador, donde diariamente se moviliza más de un millón de personas.
Los transportistas han recibido llamadas de los mareros en las que les indican que pueden transitar. "Han llamado a las rutas de que se puede trabajar", dijo a un diario local el miembro de Rutas Unidas Juan Pablo Álvarez.
El Gobierno no ha confirmado ni negado la presunta suspensión del conflicto del transporte. Un paro similar tuvo lugar en el 2010 cuando, como en la actualidad, las pandillas presionan por sentarse a negociar con el Gobierno en busca de beneficios y de frenar las acciones represivas en su contra.
Las maras pasaron de las amenazas a las acciones homicidas al asesinar en los últimos tres días a 11 empleados del transporte público e hirieron a cuatro más. "Estas acciones son terroristas", aseguró el secretario de Comunicaciones de la presidencia, Eugenio Chicas.
Las llamadas telefónicas, dijo Álvarez, se comenzaron a recibir desde el mediodía de este jueves. "Se verá si es cierto en el hecho de que no haya más víctimas mortales", apuntó Álvarez.
Por su parte, el comisionado presidencial para la Seguridad, Hato Hasbún, dijo que este jueves la situación se normalizaría debido al apoyo en seguridad ofrecida por la policía y el ejército, además del apoyo que el gobierno ha brindado con sus autobuses y camiones para transportar gente.
Esta mañana muchas unidades de autobuses, microbuses y camiones estaban acompañadas de soldados y policías fuertemente armados.
Fotos: Reuters
También las autoridades de seguridad informaron que al menos unos 20 pandilleros relacionados con el sabotaje al transporte han sido detenidos y remitidos a los tribunales de justicia.
El Salvador es uno de los países más peligrosos del mundo por sus altas tasas de homicidios que sobrepasan los 60 por cada 100.000 habitantes. Oficialmente se estima que la mayoría de los crímenes en El Salvador los cometen las maras.
Fuente: DPA