(EFE). Las crecidas del río Paraguay a su paso por Asunción han causado que unas 90 mil personas sean desplazadas de sus hogares, la mayoría de las cuales están ubicadas en refugios de madera y chapa. Todo ellos pasarán la Navidad prácticamente a la intemperie, en improvisados refugios de madera que han tenido que construir en calles y plazas.
Este jueves la crecida del río Paraguay se situó en 7,71 metros de altura, superando las previsiones que calculaban una altura de 7,50 metros para Navidad, por lo que la cifra de desplazados continúa al alza, dijo Víctor Peralta, director de Emergencia y Desastres de la Municipalidad de Asunción.
Según Peralta, la mayor parte de los miles de evacuados están instalados en refugios, aunque algunos se mudaron a domicilios de parientes o de personas allegadas. El temporal ha provocado riadas, cortes de luz en gran parte de Asunción y daños en muchos de los cerca de cien refugios que dan techo a los desplazados.
La situación por el río Paraguay se ha vuelto más complicada debido al viento y lluvia que desde esta madrugada golpea Asunción y el departamento Central, lo que ha causado la muerte de cuatro personas al caer dos árboles sobre los dos vehículos en que viajaban.
El funcionario no descartó que el río siga subiendo y con ello el número de evacuados, quienes en su mayoría proceden de los Bañados, dos barrios asentados sobre la franja del Paraguay.
Las crecidas del río Paraguay a su paso por Asunción son habituales, aunque se han hecho más frecuentes en los últimos dos años. Del total de evacuados, unos 10.000 siguen fuera de sus hogares desde la crecida de 2014, que dejó unos 85.000 damnificados en esta localidad.
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— El Comercio (@elcomercio) diciembre 24, 2015
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