Numerosos vehículos blindados de la policía turca rodearon hoy el barrio de Estambul donde se había congregado el cortejo fúnebre de Berkin Elvan, el adolescente fallecido ayer luego de nueve meses en coma, y los agentes cargaron contra los miles de participantes en la marcha.
La carga policial, con cañones de agua a presión y gases lacrimógenos, y que pudo verse en imágenes de la cadena "Halk TV" en directo, se produjo poco después del entierro de Elvan, víctima de un supuesto disparo policial durante las protestas en junio del año pasado.
Según relataron testigos a Efe, la policía turca cargó con gran dureza contra las decenas de miles de personas congregadas en el barrio de Osmanbey, atrapados entre numerosos dispositivos policiales.
La policía decidió intervenir cuando cientos de personas se dirigían hacia la plaza Taksim, lugar emblemático de las protestas contra el gobierno de Recep Tayyip Erdogan.
Ayer mismo, apenas se conoció la muerte del joven, miles de manifestantes se habían congregado de forma espontánea en las grandes ciudades del país. Más de 250 personas fueron detenidas, según la prensa turca.