La cosa se pone seria. El polémico romance entre el mandatario de Francia, Francois Hollande, y la actriz Julie Gayet, inicia la semana erizando a la clase política.
A las revelaciones, que dejaron en el hospital a la aún primera dama, Valérie Trierweiler, se suman detalles sobre la naturaleza del escondite que los amantes solían frecuentar. Se trata del departamento ubicado en la Rue du Cirque, al cual Hollande llegaba en una motocicleta conducida por un guardaespalda.
Desde enero del 2013, el presidente galo visitó el piso parisino al menos una docena de veces. Su único resguardo: dos escoltas y ambos en motocicleta, según afirmaron fuentes del Palacio del Eliseo.
Ubicado a dos calles de la sede de Gobierno, el inmueble en el que Hollande se encontraba con su amada Julie, tenía vínculos con el grupo 'Brisa de Mar', uno de los más violentos de la mafia corsa, indicó el medio digital "MediaPart".
TRES GRADOS DE SEPARACIÓN
¿Cómo se relaciona el departamento con conocido grupo criminal? El clandestino nido de amor es propiedad de un jubilado de 71 años, de nombre Jean-Pierre Discazeaux, que vive en Biarritz. En el 2011, el anciano alquiló el departamento a la actriz Emmanuelle Hauck, amiga de Julie Gayet.
Hauck le prestó a Gayet el inmueble para que se encontrará con su amante, quien nada más y nada menos es el presidente de Francia.
En esta cadena de arrendamientos y favores, quien tiene vínculos con la mafia es Emmanuelle Hauck, sus dos esposo tienen un controversial historial manchado de violencia y corrupción.
El primero, Michel Ferracci, también actor, fue condenado en noviembre a 18 meses de cárcel por actuar de forma desleal contra la justicia a la que ayudaba brindando información sobre la banda italiana Brisa de Mar, con la que mantenía una relación muy cercana.
El segundo esposo de Hauck, François Masini, fue asesinado a balazos el 31 de mayo de 2013 durante un ajuste de cuentas en el norte de la isla mediterránea de Córsega.
NEGLIGENCIA EN LA SEGURIDAD
Hasta el momento, quien se ha llevado la peor parte sobre esta revelación ha sido el Ministro del Interior, Manuel Valls, contra quien se han emitido duras críticas al no haber resguardado al presidente adecuadamente, al punto que no fue díficil para los paparazzis alquilar un piso frente al departamento para poder tomar varias fotografías de un enamorado e impulsivo Hollande.
Por su parte, Valls ha respondido a través de "Le Monde" y "Mediaparte" que el "no estaba al corriente de los desplazamientos del presidente": "Si decide ir a algún sitio, es su responsabilidad", aseguró .
El titular a cargo de la seguridad ciudadana del país galo rechazó cualquier responsabilidad sobre el asunto. Según la autoridad, el equipo a cargo del resguardo de Hollande es el Grupo de Seguridad de la Presidencia de la República (GSPR), dirigido por la comisaria Sophie Hatt. Valls aseguró que la GSPR "dispone de una absoluta autonomía de funcionamiento".