Qué son las municiones con uranio empobrecido que EE.UU. entregará a Ucrania (y qué se sabe sobre los riesgos de cáncer)

Estados Unidos anunció el miércoles que enviará armamento con uranio empobrecido a Ucrania, algo que ha sobresaltado a Rusia, que calificó el hecho como un “acto criminal” que conducirá a una escalada. La entrega formará parte de un paquete de asistencia militar de Washington a Kiev por 175 millones de dólares, dijo el Pentágono.

Mediante un comunicado, el departamento de Defensa sostuvo que los proyectiles de 120 mm son para los tanques M1 Abrams que Estados Unidos se comprometió a suministrar a Ucrania.

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Específicamente, en enero de este año el presidente estadounidense Joe Biden prometió a Ucrania la entrega de 31 tanques M1 Abrams.

De acuerdo con la prensa estadounidense, 200 soldados ucranianos ya han sido entrenados en Alemania para conducir los tanques M1 Abrams.

Esta es la primera vez que Estados Unidos informa de la entrega a Ucrania de munición con uranio empobrecido.

Los primeros diez tanques M1 Abrams

prometidos por Estados Unidos a Ucrania llegarían a su destino a mediados de este mes, según el medio estadounidense Político.

“Queremos asegurarnos de que los ucranianos pueden ser tan efectivos como sea posible en esta contraofensiva”, explicó en Washington el portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby.

En una primera reacción, el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, anticipó el mércoles que habrá una escalada en el conflicto.

“Esto es, de hecho, un acto criminal, no puedo dar ninguna otra evaluación”, sostuvo Riabkov, según la agencia oficial TASS.

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Y este jueves, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, manifestó que el suministro de estos proyectiles es una “muy mala noticia” por las consecuencias para la población del territorio en la que va a ser empleada la munición.

Peskov recordó que las municiones con uranio empobrecido fueron usadas activamente en Yugoslavia con “consecuencias muy, pero muy tristes, registradas inclusos por organizaciones internacionales”.

Agregó que hubo un “aumento galopante de enfermedades oncológicas y otras”. ”Las secuelas se dejaron sentir en los descendientes de aquellos se hallaban en la región donde se emplearon esas armas o estuvieron en contacto con ellas”, dijo.

Además…

Reino Unido también envió municiones con uranio empobrecido

En marzo de este año, el Reino Unido fue el primer país en anunciar el envío a Ucrania de municiones con uranio empobrecido para los tanques británicos Challenger 2.

El presidente ruso Vladimir Putin advirtió entonces que Moscú “respondería en consecuencia, dado que Occidente en conjunto ha comenzado ha utilizar armas con un ‘componente nuclear’”.

Mientras que su ministro de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, sostuvo que las municiones constituían “un paso en dirección a acelerar el agravamiento” en la letalidad de las armas.

Días después, Putin señaló que Rusia respondería a la acción británica con la instalación de armas nucleares tácticas en la vecina Bielorrusia, algo que finalmente sucedió.

A continuación, una explicación sobre cómo son las municiones con uranio empobrecido y el peligro que representa su uso:

Durante la Guerra Fría, Estados Unidos desarrolló los proyectiles de uranio empobrecido para penetrar blindajes de los tanques soviéticos, entre ellos los mismos T-72 que Ucrania enfrenta en su actual contraofensiva contra los rusos, recordó la agencia AP.

Mientras que la agencia AFP explicó que el uranio empobrecido es un producto derivado del proceso de enriquecimiento del uranio (que se usa para fabricar armas nucleares). Es alrededor del 60% menos radioactivo que el uranio natural.

Agregó que el uranio es un metal muy denso: 1,7 veces más que el plomo y es tan duro que en un proyectil no se deforma cuando golpea su objetivo.

Así, el uranio empobrecido es empleado en proyectiles perforantes para atravesar el blindaje de vehículos y buques.

“Es tan denso y tiene tanto impulso que atraviesa la armadura del tanque a tanta temperatura que provoca un incendio”, manifestó al diario británico The Guardian Edward Geist, experto nuclear de la institución estadounidense Rand non.

Scott Boston, analista senior de la misma organización, precisó que la munición con uranio empobrecido “se convierte esencialmente en un dardo de metal tóxico disparado a una velocidad extrema”.

Edward Geist dijo que los proyectiles conservan algunas propiedades radiactivas, pero no pueden generar una reacción nuclear similar a la de un arma atómica.

Por su parte, el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca trató de minimizar las preocupaciones al decir que estas municiones son de uso común y asegurar que los proyectiles “no son radioactivos” y “no se acercan para nada” a la categoría de los armamentos nucleares.

Las municiones con uranio empobrecido no están prohibidas por el derecho internacional.

El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de la ONU sostiene que la munición de uranio empobrecido no puede generar una reacción nuclear y que es “considerablemente menos radioactivo que el uranio natural”.

El OIEA también ha dicho que podría haber un riesgo para individuos que manejen fragmentos de proyectiles de uranio empobrecido.

El manejo de ese tipo de municiones “debería mantenerse al mínimo y deberían utilizarse atuendos protectores (guantes)”, señaló el OIEA. Dijo también que, “por lo tanto, podría ser necesaria una campaña de información pública para garantizar que las personas eviten manejar los proyectiles”.

El OIEA hizo notar que el uranio empobrecido es en esencia una sustancia química tóxica, en contraposición a un peligro de radiación. Las partículas en aerosoles pueden ser inhaladas o ingeridas, y aunque la mayor parte serían excretadas, algunas pueden ingresar al torrente sanguíneo y dañar los riñones.

“Las concentraciones altas en los riñones pueden dañarlos y, en casos extremos, causar insuficiencia renal”, señaló el OIEA.

Un informe del 2001 de la Organización Mundial de la Salud (OMS) planteó dudas científicas sobre el aumento de los casos de leucemia en los Balcanes a causa del uranio empobrecido, por lo que recomendó la limpieza o el bloqueo de los lugares contaminados, debido a las “incertidumbres persistentes”.

“Parece improbable, por varias razones, que la leucemia sea resultado de una exposición al uranio empobrecido en el conflicto de los Balcanes”, dijo aquella vez el doctor Mike Repacholi, científico de la OMS, pero admitió que “persisten incertidumbres” sobre los efectos del uranio empobrecido.

Mientras que el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUE) ha puntualizado que el uranio empobrecido es un “metal pesado, química y radiológicamente contaminante”.

La agencia AFP dice que al golpear su objetivo, los proyectiles perforantes esparcen polvo y fragmentos de uranio. En materia de salud, “el principal riesgo que plantea el uranio empobrecido no es la radioactividad, sino el carácter tóxico químico”.

También cita a la Comisión de Seguridad Nuclear de Canadá, que señala que si una persona inhala grandes cantidades de partículas durante un largo periodo, “la principal preocupación para la salud será el aumento del riesgo del cáncer de pulmón”.

Las municiones de uranio empobrecido han sido utilizadas por los tanques estadounidenses en la Guerra del Golfo de 1991 contra los tanques T-72 de Irak, y de nuevo en la invasión a Irak del 2003, al igual que en Serbia y Kosovo.

También se usó en dos ocasiones en Siria en el 2015 en operativos contra el grupo yihadista Estado Islámico.

La agencia AP sostiene que los militares estadounidenses han preguntado si algunos de los problemas de salud que padecen actualmente se deben a la inhalación o exposición a fragmentos luego de haber disparado ese tipo de municiones, o cuando sus tanques fueron alcanzados por fuego enemigo que dañó los blindajes reforzados con uranio empobrecido.