Durante la campaña electoral, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que lograría un acuerdo con el mandatario de Rusia, Vladimir Putin, y el de Ucrania, Volodymyr Zelensky, para poner fin a la guerra en 24 horas, incluso antes de que asuma el poder el próximo 20 de enero. Pero no dio detalles de su plan. Quien sí tiene claras las condiciones para acabar con el conflicto, y las ha mencionado públicamente, es el líder del Kremlin. ¿Qué ha respondido Kiev a ambos líderes de las mayores potencias militares del mundo?
Tanto Putin como Zelensky han felicitado a Trump por su triunfo en las elecciones del 5 de noviembre. Incluso el segundo habló con el magnate por teléfono.
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Bajo el lema de “Estados Unidos primero”, Trump anunció en campaña que ordenará un repliegue de la presencia de Estados Unidos en el mundo. Los analistas dan por descontado que esta nueva estrategia afectará la ayuda militar que recibe Ucrania de Washington, que ha destinado 108.000 millones de dólares desde el inicio de la invasión rusa en febrero del 2022.
Ante la falta de detalles sobre la estrategia de Trump para conseguir la paz en Ucrania, algunos analistas estadounidenses que respaldan al presidente electo sostienen que se buscaría una negociación para declarar un armisticio en la actual línea del frente de batalla, lo que en la práctica supondría la anexión a Rusia de parte del este de Ucrania.
Eso es lo que precisamente persigue Putin como condiciones para una negociación de paz. En junio pasado las enumeró, y las volvió a repetir más adelante.
Por su parte, Zelensky ha dicho durante una entrevista con Sky News que quiere trabajar directamente con Trump, y que está abierto a sus ideas.
Zelensky agregó que su jefe de gabinete, Andriy Yermak, viajará a Estados Unidos lo antes posible para mantener varias reuniones, entre ellas con el elegido por Trump para ser enviado especial a Ucrania, Keith Kellogg.
La cadena CNN indicó que Kellogg es partidario de un alto el fuego y de conversaciones de paz entre Moscú y Kiev, que incluirían garantías de seguridad para Ucrania como protección frente a futuras invasiones rusas.
Las duras condiciones de Putin para la paz
Putin exige que Ucrania retire totalmente sus tropas de los territorios ucranianos que Rusia se anexó desde que lanzó su invasión. Estos son Donetsk, Lugansk, Kherson y Zaporizhzhia.
También quiere que Ucrania renuncie a su intención de ingresar en la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN) antes de que pudieran iniciarse conversaciones de paz. Y la desmilitarización de ese país.
Además, busca el reconocimiento de la anexionada península de Crimea como territorio ruso.
Putin planteó que se levanten todas las sanciones económicas que ha impuesto Occidente a Rusia desde que se inició la guerra.
Ucrania ha calificado de inaceptables las condiciones de Putin, especialmente las relacionadas con la renuncia a su territorio.
El presidente Zelensky reconoció recientemente que Ucrania debe encontrar soluciones diplomáticas para poner fin a la guerra y asegurar de que se le devuelvan territorios ocupados, incluida Crimea.
Putin quiere la capitulación de Ucrania
Esta semana, el diario Financial Times informó que voces prominentes dentro del espacio informativo ruso enfatizan que Putin no está interesado en una solución negociada a la guerra en Ucrania que resulte en algo menos que la capitulación total de ese país.
El Financial Times entrevistó al oligarca ruso Konstantin Malofeev, cercano al Kremlin, nacionalista ortodoxo y fundador del medio ultranacionalista Tsargrad, quien dijo que Putin probablemente rechazará cualquier plan de negociaciones de paz que Trump le presente, a menos que este tenga en cuenta las “preocupaciones de seguridad” de Rusia.
Malofeev afirmó que el Kremlin solo considerará las negociaciones de paz con la administración Trump si el republicano revierte la política estadounidense que permite a Ucrania usar armas de largo alcance proporcionadas por Occidente para atacar a Rusia, y “deponer” al presidente Zelensky de su cargo.
De acuerdo con Malofeev, Trump también debe aceptar reunirse con Putin para discutir la situación en Ucrania, la futura seguridad europea, el conflicto en Medio Oriente y la creciente alianza de Rusia con China. Putin podría tener la intención de utilizar esa reunión para arrancarle a Trump futuras concesiones políticas estadounidenses sobre estos temas, anotó el oligarca.
Malofeev también afirmó que la guerra en Ucrania ha ayudado a fortalecer las relaciones de Rusia con China, Irán y Corea del Norte y ha revitalizado la economía y la industria de defensa de Rusia.
Según el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), la entrevista a Malofeev indica que el Kremlin no está interesado en negociaciones de buena fe y más bien está empeñado con destruir el Estado Ucraniano por medios militares.
Sobre la relevancia de la palabra de Malofeev, el ISW precisó que el oligarca ha utilizado su medio Tsargrad para promover narrativas del Kremlin que justifican la invasión y ocupación de Ucrania, y sigue siendo un partidario abierto de Putin.
"El derecho internacional ampara a Ucrania"
Para Andrés Gómez de la Torre, especialista en temas de defensa e inteligencia, el panorama es complejo para una posible negociación bilateral directa entre los gobiernos de Moscú y Kiev, pese a los anuncios de Trump de desmarcarse de la política que ha tenido la administración demócrata de Joe Biden, que está centrada en un apoyo total a Ucrania a través de la entrega de la logística bélica.
“Hay puntos muy complicados porque las partes tienen posiciones irreductibles. El meollo por la parte rusa y la posición de Putin es que Ucrania renuncie a su ingreso en la OTAN, que ha sido uno de los temas que ha viabilizado la operación militar especial o la invasión rusa a Ucrania. Fue una cuestión política muy sensible que percutó la última gran ofensiva, más allá de la del 2014”, dijo Gómez de la Torre.
“La posición rusa también es que, si bien controla partes de Donetsk, Lugansk, Kherson y Zaporizhzhia, todavía hay tropas ucranianas, entonces exige que estas se retiren antes de una posible negociación. Rusia también sugiere que Ucrania sea desmilitarizada, en el sentido de asumir la condición de Estado de neutralidad perpetua, como en algún momento antes de su ingreso a la OTAN lo fueron Suecia y Finlandia”, enumeró Gómez de la Torre.
“Creo que a la larga las negociaciones van a ser muy difíciles, y lo que se puede prever es que más que un acuerdo de paz, probablemente exista una línea de alto el fuego, una suerte de línea roja de alto el fuego, pero no necesariamente de paz, en donde no haya choques militares. Pero esto no inhibe la posibilidad de que existan modalidades de guerra híbrida, estas guerras experimentales como la que Rusia le planteó a Estonia, desde el punto de vista de la ciberseguridad y la ciberdefensa”.
Gómez de la Torre considera que para Zelensky y Ucrania, ceder a las exigencias rusas sería la crónica de una derrota anunciada. “Ucrania se está parapetando en los principios de derecho internacional relacionados con el no reconocimiento del uso de la fuerza en materia de anexiones y adquisiciones territoriales”.