Una mujer es detenida por una infracción menor de tráfico. El policía le pide que se baje, comienza una discusión, es sometida con fuerza por el oficial -que la amenaza con una pistola de descarga eléctrica- y acaba arrestada por agresión. Días despúes, aparece muerta en su celda.
Es lo que le ocurrió la semana pasada a Sandra Bland, una mujer negra de 28 años, en el pequeño condado de Waller, Texas.
Un caso que fue descrito preliminarmente como un suicidio pero que ha despertado tantas sospechas que está siendo investigado como posible homicidio.
Un análisis forense determinó que Bland se suicidó en prisión. Pero este lunes, el fiscal que lleva el caso anunció que será "investigado como un homicidio" con la ayuda del FBI, aunque dijo que "es demasiado pronto para determinar cómo murió".
El hecho ha desatado, una vez más, el debate sobre cómo son tratados los negros por la policía estadounidense.
-Los hechos-
Sandra Bland fue detenida por la policía de seguridad vial en la localidad de Hempstead, al noroeste de Houston, mientras conducía la el viernes 10 de julio, después de supuestamente no señalizar correctamente un cambio de carril.
Según la versión inicial de las autoridades, se desató una confrontación con la mujer quien presuntamente le dio patadas a un policía, por lo que fue arrestada y acusada de agredir a un funcionario público.
Un video hecho por un testigo muestra a la mujer sometida por lo que parecen dos policías, gritando que el oficial la "aplastó contra el suelo".
Cuando fue detenida, Bland estaba en medio de una mudanza para iniciar un trabajo en Prairie View A & M University, universidad en la que estudió.
Uno de los argumentos que han usado su familiares para explicar por qué la mujer no pudo haberse suicidado.
"Era una mujer negra educada que tenía metas y sueños. Una ciudadana productiva", le dijo a la BBC Bianca Davi, amiga de Bland.
"Ahora esta joven murió y ellos dicen que es un suicidio. Los que la conocían saben que ella no era ese tipo de persona".
Familiares, amigos y ciudadanos indignados con la muerte de Bland bajo custodia policial han protestado en las redes sociales, en la calle y ante los medios de comunicación por su confusa muerte.
Las hermanas de Bland pidieron que se realice una autopsia independiente.
Al igual que en otros casos de la muerte de un miembro de la comunidad negra en EE.UU., el caso de Bland ha sido muy discutido en las redes sociales.
Los hashtags #SandraBland, #JusticeforSandy y #SandySpeaks se han vuelto virales desde su muerte.
La Comisión de Texas sobre Estándares de Prisiones había llamado la atención a la cárcel del condado de Waller hace tres años por no revisar a todos los reclusos cada hora, después de que otro preso se ahorcó con una sábana en 2012.
Glen Smith, alguacil de la prisión, dijo que su personal revisó a Bland menos de una hora antes de que fuera encontrada muerta.
El senador del estado de Texas Royce West describió su muerte como "sospechosa".