Moscú/Bruselas (DPA) El presidente ruso, Vladmir Putin, dio hoy un ultimátum a Ucrania para que pague sus deudas millonarias contraídas por la venta de gas en el plazo de un mes, dijo en un programa de televisión en directo en el que se sometió a preguntas de los espectadores.
La ex república soviética tiene aún un mes de plazo para pagar las deudas que Rusia cifra en 16.600 millones de euros. Después, Moscú exigirá pagos adelantados por el gas, dijo el jefe del Kremlin. Las deudas hicieron además que el gigante energético estatal ruso Gazprom aumentara el precio del gas a Ucrania.
Putin ya había amenazado el 10 de abril con la posibilidad de cortar el suministro a raíz de las deudas y reconoció que la situación podría repercutir en el flujo de gas a Europa.
Además, Rusia acusa a Ucrania de interceptar ilegalmente gas de los gasoductos que transportan gas ruso hacia Europa, algo que Kiev niega.
Rusia llamó a sus "socios occidentales" a ayudar a rescatar la economía ucraniana y consideró que no basta con garantías bancarias.
Europa es vulnerable porque gran parte del gas que compra a Rusia fluye por Ucrania. Además el torno a una tercera parte del gas que importa la Unión Europea (UE) es gas ruso. Otras disputas entre Rusia y Ucrania ya provocaron problemas en el suministro en Europa, la última en 2009.
PREOCUPACIÓN POR SUMINISTRO ENERGÉTICO
La Unión Europea (UE) pidió a Rusia que evite medidas que pudieran afectar al suministro de gas, una advertencia reiterada hoy en una carta enviada por el presidente de la comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, a Putin.
"Le pedimos firmemente que se abstenga de tomar medidas que pudieran crear dudas sobre su intención de ser visto como un suministrador fiable de gas a Europa", escribió Barroso, argumentando que "está en juego la fiabilidad contractual (de Rusia) como suministrador de gas".
Barroso señaló que la UE está dispuesta a mantener conversaciones con Rusia y Ucrania sobre cuestiones energéticas, respondiendo a un llamamiento de Putin la semana pasada a los compradores europeos de gas ruso. "Las consultas propuestas deberían ayudar a evitar un escenario extremo y salvaguardar la seguridad del suministro y el tránsito", escribió Barroso, que consideró las conversaciones "urgentes".
"Estoy convencido de que un debate constructivo sobre soluciones y acciones comunes puede llevarnos a encontrar una solución sobre la crisis actual", añadió Barroso.